Después de las copas de Europa, vuelven los campeonatos y, como cada semana, hemos seleccionado los cuatro partidos del fin de semana que merecen la pena ver.
Ni el Atalanta ni la Roma pensaron que, a finales de mayo, tendrían que lidiar con el Bolonia por un lugar en la Liga de Campeones.
Sin embargo, a diferencia de los nerazzurri y los giallorossi, el equipo de Thiago Motta podría conseguirlo calificación de matemáticas a la próxima edición de la máxima competición continental este mismo fin de semana.
Y es por ello que, independientemente de lo que suceda en la final de la Europa League, La de Bérgamo será una especie de final con la quinta plaza en juego, la última de acceso a la Liga de Campeones..
Sin duda, el destino del partido estará influenciado por los resultados, las actuaciones y los estados de ánimo que acompañarán a los de Gasperini y De Rossi en el campo después de su último partido europeo.
Y hablando de finales, el Lecce también está muy cerca de su objetivo de la temporada y podría lograrlo el próximo fin de semana al final del choque directo contra el Udinese.
Los de Apulia tienen a su disposición dos de tres resultados útiles teniendo en cuenta que están siete puntos por delante de los friulanos, actualmente penúltimos.
Decisivo para los Giallorossi, el estallido de orgullo registrado en las últimas cuatro jornadas del campeonato: las dos victorias y el mismo número de empates le han permitido, de hecho, protegerse prácticamente de cualquier riesgo.
Sin embargo, la situación de los hombres de Fabio Cannavaro es claramente diferente, recién llegados de dos empates importantes contra el Bolonia y el Nápoles, después de un debut que duró unos minutos – y perdió – contra la Roma: lo único que importa es ganar.
El ambiciones de gloria de Brescia se enfrentan en la última jornada del campeonato con el desesperación de un Bari cada vez más en dificultades. En todos los niveles.
Los apulianos no pueden permitirse el lujo de cometer errores si quieren evitar que una temporada terrible se convierta en desastrosa el próximo fin de semana.
Y la verdad es que los rojiblancos no se acercan a los mejores de la mejor manera El desafío más importante de la temporada.considerando las amenazas recibidas y denunciadas por su director deportivo Ciro Polito.
En el frente contrario, los lombardos se acercan al partido seguro de un lugar en los playoffs y con la única preocupación de saber si lo cerrarán temporada regular en sexto, séptimo u octavo lugar.
Entre el diablo y el océano profundo. El Manchester United está obligado a ganar si todavía quiere tener esperanzas de recuperar una posición europea que, como sabemos, no será la Liga de Campeones.
Para ello, sin embargo, tendrán que vencer al Arsenal el próximo domingo, sabiendo que una victoria sería casi con toda seguridad sinónimo de Premier entregado al City.
Y sí, porque el equipo de Pep Guardiola le pisa los talones artilleros con sólo un punto de diferencia, pero un partido menos que recuperarán para el próximo martes ante el Tottenham.
Y es por eso que a los de Mikel Arteta no les queda otra opción: ganar al United y en siete días al Everton para al menos forzar el ciudadzen para ganar todos sus partidos.