“Las responsabilidades por lo ocurrido en la obra de Via Mariti en Florencia serán determinadas por las investigaciones. Lo cierto es que en esa obra había trabajadores subcontratados y que los mayores problemas de seguridad se esconden en las cadenas de subcontratación”, afirma el actual gobierno. ha reintroducido la posibilidad de la subcontratación en cascada en las obras públicas y todavía no da respuestas suficientes en materia de seguridad, a pesar de la constante movilización de fuerzas sindicales en esta emergencia. El candidato de centroderecha a la alcaldía haría bien en prestar atención. a la incapacidad del gobierno para actuar y no explotar este trágico acontecimiento para controversias locales y fines electorales”. Así, Bernardo Marasco, secretario general del Cgil florentino, y Marco Carletti, secretario general del Cgil florentino Fillea.
“Desde el Ayuntamiento esperamos, estamos discutiendo, que el modelo de tarjeta electrónica para las obras públicas se amplíe – añaden en una nota – con el procedimiento de construcción transparente, tal como se firmó para la obra del tranvía, y pedimos la esterilización de la subcontratación en cascada en sus adquisiciones. Pedimos a los organismos de control que intensifiquen la dimensión conjunta de los controles para maximizar su eficacia”.
“Pedimos al gobierno – observan además Marasco y Carletti – lo que está presente en nuestras plataformas nacionales y, entre estas peticiones, el aumento de personal para los controles a los que se refiere el candidato a alcalde de centro derecha. Dejemos de lado estas delicadas cuestiones de la polémica electoral, pero sobre todo hablemos de ella con competencia y sin aproximaciones inútiles”.