Aire de cambio en Nápoles. Cambios radicales. El equipo campeón italiano lucha por una plaza en las próximas competiciones europeas (Europa League o Conference League), pero al final de la temporada, dadas las decepcionantes actuaciones que provocaron la destitución de García primero y luego de Mazzarri, será protagonista de una verdadera revolución. El noveno puesto en la clasificación provisional con 50 puntos es decididamente insuficiente para un equipo que partió con el objetivo de defender el título y aspirar al cuarto superior de la clasificación.
Muchas salidas en ataque
Y qué revolución es. Especialmente en el departamento ofensivo con varios jugadores que se despedirán de la ciudad del Vesubio. Uno de los más probable es Victor Osimhen. Además del delantero nigeriano, también debería marcharse Giovanni Simeone con la Lazio, que podría estar interesada en el delantero argentino que es un hijo de arte. El futuro de Giacomo Raspadori también está en juego.
Buena idea
Al entrar, sin embargo, todas las miradas se centrarían en un jugador recién ascendido y su delantero centro. Según la edición de hoy del La Gazzetta dello Sportla atención se centraría en Ange Yoan Bonny. El delantero del Parma estuvo entre los protagonistas del regreso a la Serie A de los ducales de Pecchia, marcando siete goles en la temporada entre el campeonato y la Copa de Italia y 10 asistencias.