Estallaron protestas en el barrio Savorito de Castellammare di Stabia contra el proyecto de reurbanización llevado a cabo por los comisarios de la prefectura, encabezados por Raffaele Cannizzaro. El plan prevé la demolición y reconstrucción de parte de la vivienda pública, considerada ruinosa. Los residentes, sin embargo, se quejan de la falta de soluciones de vivienda alternativas y temen por el futuro del barrio.
La iniciativa de protesta fue promovida por las asociaciones “Giovani Arm”, liderada por Antonio Sessa, y “L’isola dei Ragazzi”, representada por Veronica Santaniello. Las dos asociaciones organizaron un banquete en el barrio para recoger firmas y crear un comité local para proteger a las familias implicadas.
“Invitamos a todos los vecinos a una reunión pública para discutir la situación – declaró Antonio Sessa -. Debemos llamar la atención de los Comisarios sobre las dificultades económicas de las familias y la falta de alternativas de vivienda. Además, solicitamos la creación de un comité vecinal para seguir de cerca el proceso de reurbanización”.
Sessa se mostró a favor del proyecto de reurbanización, pero subrayó la necesidad de una atención más atenta a las necesidades de los residentes: “Queremos un barrio renovado, pero no en detrimento de las personas que viven allí. Solicitamos una mesa técnica permanente para encontrar soluciones inmediatas y concretas para las familias de Savorito”.
El llamamiento de las asociaciones fue bien recibido por muchos vecinos, preocupados por el futuro incierto del barrio. La protesta está llamada a crecer en los próximos días, con el objetivo de obtener respuestas concretas de las instituciones.