El Papa es también obispo de Roma. Por eso la visita, que para las diócesis italianas se realiza región por región, es importante para la unidad y la comunión en la vida de la Iglesia. La Conferencia de Obispos de Apulia explica: la visita “constituye el momento más alto de las relaciones de los Pastores de cada Iglesia particular con el Obispo de Roma. Éste, de hecho, al recibir a sus hermanos en el episcopado, se ocupa con ellos de las cuestiones relativas a la bien de las Iglesias y la función pastoral de los Obispos, los confirma y sostiene en la fe y en la caridad, fortaleciendo los vínculos de la comunión fraterna”.
La visita comenzó el lunes: hasta el momento se han realizado diversas reuniones y celebraciones religiosas. Mañana, último día de la Visita, se mantendrán encuentros con los responsables del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y de las Sociedades de Vida Apostólica, del Dicasterio para la Cultura y la Educación y, finalmente, con la Secretaría de Estado, Sección de Relaciones con Estados y Organismos Internacionales.