Al concluir las iniciativas organizadas con motivo del bicentenario de la muerte de Papa Pío VII Chiaramonti (1823-2023) la Biblioteca Malatestiana ofrece una exposición centrada en su colección personal de libros. La colección, adquirida en 1941 por el Estado italiano, se conserva en la Sala Pïana, situada frente a la Biblioteca Nuti. Guardada en antiguos armarios y plutei de madera, la biblioteca papal presenta en esta ocasión sus tesoros. La exposición, titulada “Los libros del Papa Pío VII Chiaramonti en el espejo de su biblioteca”, se inaugurará el sábado 27 de abril a las 11:00 horas y ofrecerá a los visitantes un viaje a través de refinadas encuadernaciones, preciosos manuscritos, raras ediciones impresas y curiosidades.
La exposición será una oportunidad para admirar no sólo los evocadores ambientes que albergan la colección pontificia, sino también para ver de cerca textos raros y preciosos: suntuosas encuadernaciones, valiosos manuscritos iluminados, textos impresos que van de la arqueología a la ciencia, de las bellas artes a la cartografía. , sin olvidar rarezas bibliográficas y otras curiosidades. Desde los manuscritos del siglo XII hasta las obras maestras tipográficas de principios del siglo XIX, la ruta llevará al visitante a través de la cultura de la Ilustración en la que se formó el pontífice de Cesena.
La exposición estará disponible al público hasta el 30 de junio los lunes, de 14.00 a 19.00 horas, de martes a domingo y los festivos, de 10.00 a 19.00 horas, siendo la última visita a las 18.00 horas. La exposición se enmarca en la visita a la Antigua Biblioteca Malatestiana. Para información y reservas puede comunicarse al 0547 610892 o escribir un correo electrónico a [email protected]. Las otras exposiciones dedicadas al Papa Chiaramonti son “El Papa narrado” instalada en la Abadía de Santa María del Monte, “Las vestimentas del Papa” en la Iglesia de Santa Cristina y “Los dones del Papa” en la Sala del Palacio Ghini.
Visitas especiales. La Biblioteca Malatestiana organiza unos momentos especiales, de entrada gratuita, dirigidos a la ciudadanía y comisariados por los bibliotecarios de la Sección Antigua, con información en profundidad de los materiales expuestos. Viernes 3 de mayo, a las 17.30 horas, “Las bellas artes. Textos de arqueología, historia del arte y arquitectura en las colecciones de la biblioteca Pïana”; Sábado 11 de mayo, a las 11:00 horas, “Ingenio en movimiento. Ciencia y tecnología en el siglo de las Luces a través de los libros de la biblioteca Pïana”; Martes 14 de mayo, a las 17.30 horas (en el marco de la iniciativa Cuantas historias hay en la historia, organizada por el Sector de Patrimonio Cultural de la región de Emilia-Romaña en colaboración con ANAI – Asociación de Archivos Nacionales Italianos) “Un viaje a través de papeles y documentos para conocer Papa Chiaramonti, Príncipe y Pontífice”; Martes 21 de mayo, a las 21.00 horas, “Libros y más. Curiosidades de la biblioteca del Papa Pío VII”; Sábado 8 de junio, a las 11:00 horas, “Magníficos adornos. Decoraciones e ilustraciones en los libros de la Biblioteca Pïana”.
La Biblioteca del Papa Pío VII Chiaramonti. La Pïana consta actualmente de más de 5.000 volúmenes impresos, de los cuales 26 incunables y 32 del siglo XVI, y 105 manuscritos (59 medievales y 46 modernos). Sus volúmenes abarcan un lapso cronológico que va desde principios del siglo XII hasta las primeras décadas del siglo XIX e incluye, en cuanto a contenidos, numerosas ramas del saber. Esta variedad deriva de las formas en que se formó la biblioteca. De hecho, a los volúmenes reunidos por Pío VII por estar vinculados a sus intereses personales científicos, literarios, artísticos y religiosos se unieron los volúmenes impresos procedentes de la colección del cardenal bibliotecario Francesco Saverio de Zelada, adquiridos por Chiaramonti a principios de siglo XIX, así como los que fueron ofrecidos a lo largo del tiempo como regalo al pontífice: entre ellos los cuarenta manuscritos donados en 1814 por el marqués Giovanni Giacomo Lepri a Pío VII con motivo del regreso del pontífice a Roma, para contribuir a la reconstitución de la biblioteca papal, de la que las tropas francesas habían robado muchos libros durante la ocupación napoleónica.
