En Courbevoie, cerca de La Défense en París, tres niños de 12 y 13 años fueron detenidos por violar a una niña de 12 años. Según la reconstrucción del diario Le Parisien, uno de los tres era el exnovio de la víctima, que la atacó porque ella le había ocultado que era judía. Todo ocurrió el sábado por la tarde, cuando los tres llevaron a la niña a un hangar abandonado, donde la golpearon, la insultaron al grito de “sucio judío” y la amenazaron con prenderle fuego. Luego la violaron, continuaron profiriendo insultos antisemitas y la abandonaron en el acto. La víctima logró regresar a casa, contarle todo a sus padres, quienes llamaron a la policía y la acompañaron al hospital, donde se confirmó la agresión sexual.
las investigaciones
En el teléfono de su exnovio se encontraron comentarios e imágenes antisemitas, mientras que una de sus amigas admitió haberla golpeado “porque hablaba mal de Palestina”. El regreso del antisemitismo fue un tema central de la campaña electoral, y la extrema izquierda de Mélenchon fue acusada de restar importancia al fenómeno. El alcalde de Courbevoie y el senador Karoutchi condenaron el episodio y pidieron penas más severas para tales delitos.
El choque político
El asunto entró inmediatamente en la campaña electoral para las elecciones generales, previstas para el 30 de junio. La líder del partido de extrema derecha Reunión Nacional (RN), Marine Le Pen, denunció el día X “el ataque antisemita y la violación de una niña de 12 años”, calificándolo de “un crimen repugnante”. Le Pen acusó a “la extrema izquierda” de “estigmatizar a los judíos” y de “explotar el conflicto palestino-israelí”, e instó a los franceses a ser “plenamente conscientes”. El líder de La France Insoumise, Jean-Luc Mélenchon, también se pronunció al respecto, definiéndose “horrorizado por la violación” y afirmando que el episodio “pone de relieve el condicionamiento del comportamiento criminal masculino desde una edad temprana, y el racismo anti- Semita”.
