El gobierno del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky está presionando para obtener permiso para utilizar armas recibidas de Estados Unidos para ataques directos contra objetivos en territorio ruso. Así lo informó el periódico «Politico», citando a funcionarios estadounidenses anónimos. Kiev habría renovado la presión en este sentido en el contexto del avance de las fuerzas armadas rusas en la región de Járkov. Un grupo de legisladores ucranianos que visitaron Washington esta semana pidió a los miembros del Congreso federal estadounidense que apoyaran su solicitud, a la que actualmente se opone la administración del presidente Joe Biden. Según «Politico», las fuerzas ucranianas «observan desde hace semanas la acumulación de fuerzas rusas» a lo largo de la frontera entre ambos países sin poder atacarlas, antes del inicio de la reciente ofensiva rusa en dirección a Járkov. «Politico» recuerda que Estados Unidos ha suministrado a Ucrania armas de largo alcance con la condición de que no se utilicen para ataques contra territorio ruso, pero ha autorizado su uso contra objetivos en Crimea.
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“El principal problema en este momento es la política de la Casa Blanca de limitar nuestra capacidad” para atacar objetivos militares dentro de Rusia, dijo ayer en Washington David Arakhamia, presidente del partido gobernante Siervo del Pueblo. Según la publicación, los ucranianos están tratando de conseguir el apoyo del Congreso estadounidense para presionar a la Casa Blanca. Pero la administración del presidente Joe Biden no tiene intención de cambiar su posición todavía. “Brindamos asistencia para la defensa, no para operaciones ofensivas en el territorio de la Federación Rusa”, dijo un funcionario estadounidense anónimo.
