Para ayudarle a superar un momento de desánimoCarmen Russo ingresó a la Casa con la intención de apoyar a su esposo Enzo Pablo. Espera que su presencia pueda calmar el sentimiento de nostalgia que siente el coreógrafo.
Por la mañana, Enzo Paolo se entrega a algunas confesiones. Ya no cree en sí mismo, teme no haber hecho nada bueno.
Con su brío y determinación, Carmen intenta motivarlo. “Eres un hombre maravilloso“, dice, mostrándole todo su amor.
Juntos, pasaron momentos increíbles y construyeron una vida hermosa. Enzo Paolo sólo debería mejorar su autoestima y no desanimarse. “eres un ganador” continúa la mujer, reiterando que el bailarín fue un excelente esposo y un padre encomiable.
Las personas que lo rodean lo aman y lo apoyan, pero de nada sirve el aprecio de los demás si él es el primero que no cree en sí mismo.
Enzo Paolo se deja cautivar por las palabras y luego explica que ha encontrado su propia dimensión en la Casa. No le importa mucho el juego, su victoria es su permanencia en la Cámara.
Inseguro de su relación con su esposa, el coreógrafo vuelve a expresar sus temores sobre su relación. “Me temo que ya no estoy bien contigo“dados.
Carmen también lo tranquiliza desde este punto de vista. “soy una mujer muy afortunada“, dice, recordando que estas dudas siempre se han apoderado de él sin motivo alguno.
Desafortunadamente, Enzo Paolo no puede ser objetivo consigo mismo, como lo es con los demás. Por tanto, Carmen lo invita a estar más orgulloso de su viaje. Pase lo que pase, ella siempre estará a su lado.
Lo importante es no dejarse atrapar por pensamientos negativos. Siempre debemos recordar lo bello de nosotros y, tal vez, evitar aislarnos. Y si Enzo Paolo se siente solo, tendrá que volar con sus pensamientos hacia ella y María.
“Eres un punto de referencia” continúa Carmen, segura de que su marido es un hombre dulce, pero también bueno. Le sugiere que siga sus instintos y se muestre siempre como el hombre creativo y simpático que es.
Ella y María lo verán desde casa, orgullosas de él.
Un último problema parece apoderarse de Enzo Paolo, que se pone melancólico sobre todo después del episodio. Carmen lo entiende, porque en ese momento los inquilinos vuelven a tener contacto con el mundo exterior.
Pero no hay que vivirlo con aprensión, más bien es mejor pensar en divertirse.
Enzo Paolo, silencioso, acepta lo que le dice su mujer. Por ahora disfrutará los días con ella. ¿Podrá entonces poner en práctica este valioso consejo?