Más que un terremoto, parece estar asistiendo a un derrumbe en la casa de Alma, dado que también está por grabarse la despedida del director del equipo, Pier Paolo Storoni. Y no se dice, a estas alturas, que aquí acaban las salidas de la empresa de granadas. En resumen, si no fuera un asunto grave, se podría decir que el Alma se sumergió repentinamente en “Scherzi a parte”.
El miércoles fue el turno del abogado Giovanni Orciani y el técnico Gianni Gualandi, ayer fue el turno de Pier Paolo Storoni de presentar su renuncia al cargo de director técnico del equipo. “Después de solo 8 meses de vivir toda la pasión y las batallas junto al personal, el equipo y la dirección, todo esto por el equipo de mi corazón y mi ciudad, ha llegado el momento, por desgracia, de partir. No fue una decisión fácil de tomar – escribe Pier Paolo Storoni en su carta de despedida – porque en todo caso han sido 8 meses llenos de emoción y satisfacción irrepetible. Contribuí junto a todos los colaboradores, con la pasión y la resiliencia que solo un Fano es capaz de poner en marcha, al reconstrucción, de las cenizas, algo hermoso que comenzaba a tomar forma. Este año como Fanese, después de años y años de descuido, comencé a ver ese profesionalismo y seriedad de los años dorados. Ese sentimiento se rompió y alguien me hizo disminuir. esa pasión y ese deseo que había vuelto a adquirir en los últimos meses y por eso me veo obligado a dar un paso atrás. En la ocasión, sin embargo, quiero agradecer a quienes me brindaron la oportunidad de trabajar junto a él como el Sr. Mosconi como un entrenador entrenado y meticuloso, un hombre de grandes valores, el cuerpo técnico ciertamente formado por amigos pero también gente profesional y sensible, todo el cuerpo médico, el equipo: han sido y siempre serán mis muchachos, Simone Vitali gran amigo y director de grandes almacenes, el director Rino D’Agnelli, un gran profesional al que tengo un aprecio incondicional. Hace años que Fano no ve a un director de su talla. Por último, pero no menos importante, agradezco a toda esa espléndida afición de Tribuna y a los chicos de la Curva que demuestran su fe en casa y fuera con mucha pasión”.
Como confirman las palabras de Storoni, aparentemente dentro del club de via Toscanini asistimos al estallido de una serie de desacuerdos entre los distintos componentes del organigrama corporativo, conflictos mantenidos en secreto hasta ahora pero que ahora habrían salido a la luz con muchos acusaciones personales y mutuas. Un derrumbe que amenaza con dejar al presidente Mario Russo sin esa identidad Fano que había intentado este año reparar los errores que cometió antes.
Silvano Clappis