El espectáculo teatral será presentado en Mazzo, el sábado 11 de marzo en el Salone degli Stemmi en el Palazzo Lavizzari, por la compañía de teatro Gente Absurda, con motivo del Día Internacional de la Mujer.
Empezando a hablar de cuentos de hadasy en particular de Barba Azul, terminamos describiendo el arte japonés de reparar la cerámica con oro: pero en realidad en este espectáculo coral estamos hablando de personas, diferentes en muchos aspectos pero igualmente sufriendo prejuicios, por desigualdades, por persecuciones, por violencias de cualquier tipo, y por lo tanto en particular estamos hablando de mujeres.
para hablar de mujer también se da voz a los hombres, de hecho, al personaje que más imaginativamente se identifica como misógino y violento hacia las mujeres y tratamos de ir más allá de los clichés para encontrar algo más profundo: pero al final el mensaje más hermoso sigue viniendo de kintsugique nos enseña que si algo se rompe en nosotros, ya sea a manos de otros o por casualidad, esta puede ser una oportunidad para recuperar una integridad nueva, diferente, más preciosa.
El delgado hilo que une a las mujeres del espectáculo con todas las mujeres, las de la vida real, es el vestido.
El vestido que transforma a la mujer y la hace auténtica, ella misma, aun cuando ese vestido sea desgarrado, manchado de sangre, violado en su belleza y pureza.
Entonces, cabría preguntarse, ¿cómo vestir la violencia? ¿Cómo vestir todas las emociones turbulentas que experimentan las mujeres cuando son destrozadas, desgarradas, dejadas solas en su fragilidad?
¿Qué es ese vestido que representa elespejismo ¿para estar seguro? como se viste miedo ¿Qué se siente cuando esta ilusión se desvanece? como se visten debilidades de mujeres que se dejan arrollar por la perfidia (verbal y/o física) de otros hombres y mujeres? Y si estas mujeres desgarradas, a pesar de todo, a pesar de la ruptura, logran levantarse y comenzar una nueva vida, ¿de qué sirve su resiliencia? ¿Quizás de luz? ¿Dorado?
ESPEJISMO. MIEDO. DEBILIDAD. RESILIENCIA. Cuatro estados de ánimo, cuatro emociones profundas que representan la densidad de ser una mujer violada, despreciada, no considerada, menospreciada, que debe sacar coraje sólo de sí misma para seguir adelante. Cuatro momentos representados por vestidos especialmente diseñados y creados por Michela Chiecchi, una joven diseñadora de moda de Valtellina, dedicada a todas estas emociones, para todas las mujeres que han vivido, viven y vivirán estos momentos. Es un camino escrito en las texturas de los tejidos que conduce a una mayor conciencia de la propia fuerza y de las propias capacidades, para poder reafirmarse en la propia belleza, una belleza recompuesta con una nueva luz dorada, y por eso mucho más precioso.
El espectáculo, reforzado por música en vivotiene una duración aproximada de una hora y es apta para cualquier público.