La agencia espacial estadounidense NASA premió recientemente un contrato por valor de 15 millones de dólares para Starfish Spaceuna startup con sede en Seattle, para el desarrollo de una misión de inspección de desechos espaciales. Este proyecto, denominado SSPICY (Small Spacecraft Propulsion and Inspection Capability), supone un importante paso adelante en la gestión de residuos abandonados en órbita y en el desarrollo de tecnologías para el mantenimiento de satélites.
La misión SSPICY, cuyo lanzamiento está previsto para finales de 2026, utilizará la nave espacial Nutria de Starfish Space, del tamaño de un horno de cocina. Este pequeño satélite se acercará y inspeccionará varias naves espaciales estadounidenses extintas en órbita terrestre bajautilizando propulsión eléctrica. La Nutria se acercará a unos centímetros de cada objeto, observando su estado antes de pasar al siguiente.
dijo Bo Naasz, gerente técnico senior de servicios en órbita, fabricación y ensamblaje en la Dirección de Misiones de Tecnología Espacial de la NASA.