El incendio que están devastando elAmazonas podría acelerar la consecución de un “punto sin retorno”lo que transformaría el bosque tropical más grande del planeta en una sabana. Esta es la alarma dada por Carlos Nobreuno de los principales expertos en clima de Brasil, durante una entrevista con la AFP.
Nobre, de 73 años, ex miembro del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) y actualmente copresidente del Panel Científico de la Amazonía (SPA), expresó su “gran preocupación“para el”rápido“Aumento de las temperaturas globales. “El umbral emblemático de 1,5°C por encima de la temperatura media de la era preindustrial se alcanzó en junio de 2023“Sería “muy grave” incluso si ese umbral sólo se superara en 2028”, dijo Nobre, añadiendo que sería “muy grave”.
“Se han batido todos los récords. Hay que retroceder 120.000 años para encontrar esa temperatura“, dijo Noble desde su oficina en São José dos Campos, cerca de São Paulo.
Un calentamiento acelerado
Ante la pregunta de cómo explicar el aumento de las temperaturas, Noble aclaró: “Miles de científicos están tratando de explicar por qué han aumentado tan rápidamente. Se han batido récords oceánicos y las aguas son mucho más cálidas. Esto no puede atribuirse únicamente al fenómeno de El Niño. Y lamentablemente las emisiones de gases de efecto invernadero no han disminuido. Batieron récords en 2023 y se espera que sean aún mayores este año.“
Nobre también recordó que, en el momento del Acuerdo de París en 2015 y la COP26 en Glasgow en 2021, se subrayó la necesidad de reducir las emisiones un 43% para 2030 y alcanzar emisiones netas cero para 2050 para evitar superar el umbral crítico de 1,5°. DO. Sin embargo, añadió: “Dado que este umbral ya ha sido superado, el desafío será aún mayor”.
Los efectos en la vida diaria.
Sobre las implicaciones de este aumento de temperatura, Nobre señaló que la cambio climático no procede de forma lineal: “Una vez alcanzado el umbral de 1,5°C, los fenómenos climáticos aumentan exponencialmente. Olas de calor, precipitaciones intensas, sequías, incendios forestales, deshielos, tormentas en los océanos, niveles del mar… todo está aumentando más rápido, como en 2023. Y en 2024 ya podremos ver que la frecuencia de estos fenómenos extremos se está acelerando aún más y es batiendo récords”.
El papel de Brasil y la Amazonía
América del Sur, y Brasil en particular, parecen estar en el centro de estos cambios. Cuando se le preguntó si el continente se ve particularmente afectado, Noble él respondió: “Es un problema global. La gran diferencia es que en Canadá y otros lugares casi todos los incendios fueron naturales, causados por rayos, y el fuego se extendió rápidamente porque la vegetación estaba muy seca. En los países amazónicos, más del 95% de los incendios fueron provocados por humanos”.
Noble describió la creciente preocupación por el crimen organizado que explota los incendios para practicar la deforestación ilegal: “La deforestación (tradicionalmente realizada mediante la tala de árboles) se ha reducido significativamente gracias a la vigilancia por satélite, que la detecta inmediatamente. Pero los delincuentes se han dado cuenta de que este sistema sólo detecta el fuego cuando la superficie del incendio ya ha alcanzado los 30-40 m². Esto les da tiempo para abandonar la zona antes de ser arrestados.”.
¿Hacia el punto sin retorno?
Noble También reiteró el temor de que la selva amazónica esté a punto de acercarse al punto de no retorno, donde se transformará irreversiblemente en sabana: “Sin duda. Si el calentamiento global continúa y no logramos erradicar la deforestación y los incendios, habremos llegado a un punto sin retorno en 2050. En ese momento, perderemos al menos el 50% del bosque tropical dentro de 30 a 50 años.”.
Este escenario, según Nobre, no sólo implicaría la pérdida de la mayor biodiversidad del planetapero también el lanzamiento de “250-300 mil millones de toneladas de CO₂ en la atmósfera”, lo que hace aún más difícil mantenerse por debajo del umbral de 1,5°C.
Esperanzas para el futuro
A pesar de la gravedad de la situación, Noble concluyó la entrevista con una nota de esperanza: “Hay que mejorar, no hay otra solución. Si alcanzamos un calentamiento de 2,5°C en 2050 (en comparación con la era preindustrial), se podrían alcanzar otros puntos de inflexión: la pérdida total del Amazonas, el deshielo de gran parte del permafrost, la emisión de cientos de miles de millones de toneladas de CO₂. Si esto sucede, la temperatura media del planeta será tres o cuatro grados más alta a finales de siglo. Con cuatro grados más, la región ecuatorial sería inhabitable, superando los límites del cuerpo humano. París sería inhabitable en verano“.
Continuar leyendo en MeteoWeb