“¿Quizás nos enfrentamos a una nueva emergencia medioambiental? El humo tóxico se ha extendido rápidamente por todo Val Pescara, lo que plantea preguntas urgentes sobre qué sustancias se han liberado y qué impactos tienen en nuestro ecosistema. La contaminación no sólo afecta al aire, sino que también corre el riesgo de contaminar las tierras agrícolas y ganadería, con consecuencias a largo plazo que podrían afectar la economía local y la calidad de nuestros productos”.
Riccardo Di Gregorio, representante de la asociación Chieti Bene Comune, da la alarma tras los incendios ocurridos en la empresa Mag.Ma de Chieti Scalo, “que también se ocupa de residuos especiales e industriales”, y en el Kemipol de Pineto. “fabricante de disolventes y diluyentes”. Un manto de humo negro cubrió todo el valle, generando temores sobre las posibles consecuencias para la salud pública y el medio ambiente.
Di Gregorio denuncia la “insuficiencia” del sistema local de gestión medioambiental: “Las infraestructuras de vigilancia del aire, que deberían ser operativas y transparentes, no parecen capaces de proporcionar datos suficientes en tiempo real. Los ciudadanos tienen derecho a saber qué respiran y qué qué riesgos están asumiendo, pero la respuesta hasta ahora ha sido fragmentada e insuficiente”.
Otro punto crítico se refiere a los fondos Pnrr, que deberían utilizarse para reforzar la seguridad medioambiental y el seguimiento digital. “¿Qué pasó con los fondos Pnrr para innovación digital y medio ambiente? Estos fondos deberían prevenir situaciones críticas como ésta. ¿Se han utilizado eficazmente? Es necesario aclarar dónde se han invertido y cómo se utilizan para prevenir y abordar estas emergencias. “.
La asociación Chieti Bene Comune pide respuestas inmediatas y acciones concretas por parte de las instituciones. “La protección del medio ambiente y la salud pública ya no se puede gestionar de forma tosca. Necesitamos un control constante y fiable de la calidad del aire, así como una estrategia clara y transparente para proteger a los ciudadanos”.
Di Gregorio concluye con un llamamiento: “Como comunidad, pedimos un compromiso fuerte e inmediato de las instituciones para afrontar esta emergencia con las herramientas necesarias y garantizar la protección de nuestro territorio. Ya no podemos permitirnos el lujo de quedarnos solos en ante crisis ambientales de esta magnitud”.
