Firma de un protocolo empresarial entre el Ayuntamiento de Santa Fiora y Slow Food Toscana
Santa Fiora: “Somos Naturaleza” es el tema de Terra Madre Salón del Gusto 2024que se celebró estos últimos días en Turín en el Parco Dora.
También los paisajes son naturaleza e incluso la intervención humana en el territorio debe respetar, innovando, las leyes del planeta, en este caso el paisaje toscano, expresión ejemplar de la biodiversidad.
el evento Comida Lenta Toscanaque abre la Muestra, está dedicado a cultivo de olivo y de producción de petróleo en Maremma en el stand compartido con Vetrina Toscana.
El proyecto presentado compara el cultivo tradicional y el cultivo moderno. Destacando algunas características de los dos métodos, los ponentes pasaron a la historia de Omibreed, un proyecto organizado por el CNR en el que también colabora Slow Food.
“Este importante proyecto – comenta el Dr. Cantini, tecnólogo del CNR, tiene como objetivo investigar las características de resistencia en los olivos centenarios diseminados por la zona de la Maremma, para combatir la plaga de Xylella con el patrimonio de la biodiversidad genética y no química”.
La olivicultura es una de las producciones simbólicas de la Toscana en términos de calidad y la más importante en términos de extensión territorial, más que los viñedos. Además, el CNR ha detectado aproximadamente otros 50 cultivares que enriquecerán el parterre de las 180 variedades ya presentes en Toscana.
El panel no pudo evitar abordar la cuestión del precio del aceite de oliva obtenido de diferentes maneras y su consiguiente impacto en la restauración pero también en la cocina doméstica diaria.
“El aceite merece un mayor respeto por su calidad, por sus funciones nutricionales y por el papel que desempeña el olivo en la lucha contra la inestabilidad hidrogeológica. Es necesario trabajar en la educación del consumidor y hacer comprender que el origen y la calidad de un aceite son criterios a tener en cuenta, como y más que el vino”, añadió Luca Papalini, doctor en Agricultura y Enología.
La mesa redonda, moderada por el presidente de Slow Food Monteregio, Claudio Seghi, concluye con una cata guiada de aceites de oliva a cargo de Papalini, catador profesional.
El segundo día de feria se abre de nuevo con la zona de la Maremma y uno de sus productos típicos cebolla de selvavinculado a un modelo de desarrollo territorial sostenible que el Municipio de Santa Fiora, a través del alcalde federico balocchi y el concejal Tommaso Pastorelli, pensaron en la valorización de tierras baldías, incentivando las pequeñas explotaciones y promoviendo nuevas explotaciones.
El proyecto supone la creación de un núcleo rural mediante la transformación de algunas estancias del Convento de las SS. Trinity en una incubadora de empresas rurales.
Cantini del CNR ilustra también las superiores características organolépticas de este producto debido a la fuerte acción del suelo y del agua, que presentan características particulares a gran altura.
“No sólo estar atentos a la biodiversidad, sino también proporcionar herramientas de trabajo gratuitas en la zona de Amiata con una profesionalidad de alto nivel para enriquecer una zona que vive con orgullo una filosofía slow”, comenta el alcalde Balocchi.