Continúa la ronda de reuniones de la consejera regional de Agricultura en la zona Alessio Mammi para hacer balance de los daños causados a los cultivos, a la tierra y al ganado por las inundaciones que azotaron las zonas de Bolonia y Romaña del 17 al 19 de septiembre. Mammi se reunió ayer con instituciones y asociaciones de productores agrícolas y agroalimentarios en el municipio de Budrio, en la zona de Bolonia, con la alcaldesa Debora Badiali y la estructura técnica regional. Una cita que también fue una oportunidad para debatir la evolución de las compensaciones vinculadas a la financiación en el sector agrícola por otros episodios graves de mal tiempo e inundaciones relacionados con 2023.
En particular, el concejal Mammi propuso crear un mesa de operaciones para las actividades de restauración de tierras: una hipótesis compartida por todas las asociaciones agrícolas y agroalimentarias que han pedido acelerar los procedimientos de compensación a nivel nacional, especialmente por la pérdida de producción, y han reiterado la preocupación por el funcionamiento de Agricat y por la necesidad de hacer el territorio seguro.
“Ya estamos trabajando en la zona para intervenciones extremadamente urgentes – afirmó Mammi -. Es necesario acelerar los procedimientos de intervención y es necesario trabajar para asegurar el territorio donde se necesitan intervenciones a largo plazo, incluido el sector del agua. Hay que trabajar con los agricultores y las asociaciones empresariales agrarias y agroalimentarias porque son conscientes de las necesidades de los territorios. Además, es necesario revisar el funcionamiento de Agricat en cuanto a las metodologías de compensación, los temas y la intensidad de las ayudas previstas”.
Los recursos disponibles a partir de la inundación de 2023
Los recursos puestos a disposición para la reconstrucción proceden del fondo de crisis de la Comisión Europea, cofinanciado por el Estado por un importe de unos 100 millones de euros, íntegramente desembolsados.
Se asignaron 48,2 millones de euros a la región de Emilia-Romaña mediante la ley 100/2023 para la restauración de estructuras y la falta de producción en el sector ganadero. Las 433 solicitudes de contribución recibidas (por un valor total de 64,5 millones de euros) están todas bajo investigación y 144 ya están en fase de pago. Con los ahorros que están registrando las investigaciones, probablemente se financiarán todas las solicitudes elegibles.
Los 50 millones previstos en la ley 100/2023 para la contribución por la pérdida de producción agrícola son más difíciles de proporcionar a nivel nacional.
La empresa Agricat-Agea ha recogido 5.270 solicitudes. De las primeras concesiones se constató que los índices (aprobados por Agricat) utilizados para calcular el daño económico resultaron ser significativamente inferiores al daño real.
Más de un año después de la inundación, todas las solicitudes presentadas en la plataforma Agricat relacionadas con deslizamientos de tierra o sin los requisitos subjetivos para acceder al fondo han sido transferidas a la Región. Se asignaron en total 8 millones de euros a las regiones implicadas (Emilia-Romaña, Toscana y Las Marcas, pendientes de distribución). En lo que respecta a Emilia-Romaña, se transfirieron 1.397 solicitudes de aportaciones por un importe total de 2,1 millones de euros. La Región deberá realizar la investigación y liquidación.
La Región también dispone de 106 millones de euros gracias al fondo de solidaridad de las Regiones italianas, que se licitarán y gastarán según las normas de Desarrollo Rural 2023-2027.
Además, el Comisario de Reconstrucción recibió 480 solicitudes presentadas por empresas agrícolas, por un valor total de 43,5 millones de euros.