Sindicato.
“Hay que vencer el silencio de la muerte, ese silencio y soledad que quedan tras la tragedia en las familias que la han sufrido”. Así, el secretario general de la Uil, PierPaolo Bombardieri, quiso recordar esta mañana en Milán las numerosas víctimas de los accidentes laborales. De hecho, el flash mob itinerante de la Uil continúa, con ataúdes expuestos en las calles de las ciudades de nuestro país, para sensibilizar a la opinión pública y a la política sobre la tragedia de las muertes en el trabajo. Después de Roma, Nápoles y Florencia, hoy le tocó el turno a la capital lombarda: 172 ataúdes estaban alineados en la Piazza della Scala, tantas como las víctimas en 2023 en esta Región. “Queremos hablar al corazón y a la mente de aquellos que piensan que no es su problema – prosiguió Bombardieri – queremos dejar claro que es una cuestión que concierne a todos y que, si no hay respeto por la vida humana, cualquier otra discusión no tiene sentido. Esta cuestión, así como la de la seguridad y la dignidad del trabajo, deben ser problemas que unan y no que dividan. Por eso – subrayó el dirigente del Uil – pedimos una vez más al Gobierno que abra una discusión juntos. con los empresarios y los ministros interesados, para que la seguridad en el lugar de trabajo sea la prioridad del país: no se puede sacrificar ninguna vida en aras del beneficio. Nuestras propuestas son conocidas: más inspectores, más inspecciones, no a la contratación en cascada, uniformidad de las normas en materia de contratación público-privada, la creación de una fiscalía especial y el asesinato por violación de las normas de seguridad en el lugar de trabajo, porque si los dispositivos de seguridad han sido manipulados no podemos hablar de accidentes sino de asesinatos. Estamos convencidos de que no basta con comentar con una simple declaración las invitaciones del Presidente de la República y del Santo Padre a comprometerse en este frente y respetar a las personas, sino que se necesitan hechos concretos. Continuaremos nuestra batalla – concluyó Bombardieri – hasta llegar a cero muertes en el trabajo”.
Roma, 10 de mayo de 2024
