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“No me secuestraron, quería suicidarme”. Durante un nuevo interrogatorio ayer por la tarde, Milena Santirocco, la profesora de danza de Lanciano, desaparecida hace dos domingos y encontrada en Castel Volturno el sábado por la noche, confesó el falso secuestro. Después de contar la historia de un secuestro por parte de dos encapuchados, que también intentaron ahogarla, se derrumbó y dijo que todo se lo había inventado. “Estaba desesperada, quería quitarme la vida”.
Milena Santirocco interrogada durante 8 horas, confirma versión del secuestro. El fiscal: “Ella está bien, ha vuelto con su familia”
El falso secuestro
Desde el domingo 29 de abril no había noticias suyas: las búsquedas comenzaron en un aparcamiento del paseo marítimo de Sangro Marina en Turín, donde se encontró su Renault Clio. El día había comenzado de forma completamente normal, Milena había almorzado con sus hijos y por la tarde había decidido ir a la zona costera que tanto amaba, tal vez para dar un relajante paseo. A partir de ese momento no se perdió ningún rastro de él: su teléfono móvil ya no daba señales de vida, siendo la última señal conectada a un celular a las 18.37 horas. Pero muchas cosas no cuadran y hay varios puntos oscuros en este controvertido asunto.
Milena, que reapareció mojada y herida en Castel Volturno, dijo inicialmente que dos secuestradores encapuchados habían intentado ahogarla. En realidad – admitió anoche – se habría arrojado voluntariamente al estanque en un intento de suicidarse, pero no lo habría conseguido. Entonces surgió la idea de simular el secuestro.
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