Una jornada de reflexión sobre la identidad sarda

En Cerdeña, el 28 de abril no es sólo un día en el calendario, es un poderoso símbolo de identidad, historia y aspiración colectiva. En esta ocasión de “Sa Die de sa Sardigna”, mientras los sardos celebran su cultura única y su rica y compleja historia, reflexionamos sobre lo dicho hoy por la presidenta de la Región, Alessandra Todde, durante las celebraciones en el Consejo Regional. . El Presidente Todde subrayó una verdad fundamental: los sardos tenemos una historia digna de ser celebrada.

Una historia que no se compone sólo de dominaciones externas, sino también de momentos en los que el pueblo sardo luchó activamente por su libertad y su identidad. “Y con emoción tomo la palabra para celebrar con vosotros ‘Sa Die de sa Sardigna'”, comenzó el presidente, invitando a todos a reflexionar profundamente sobre nuestra identidad colectiva. El recordatorio del presidente de no reducir “Sa Die” a una ocasión para una retórica vacía o una autocomplacencia aislada es particularmente significativo. La invitación es a ver este día como un punto de partida para un compromiso diario hacia la comprensión, la unidad y la autodeterminación de nuestra comunidad. “Sa Die no es ni debe ser una resaca de orgullo o de venganza que nos exima de ocuparnos de nuestra conciencia y de nuestra acción política todos los días del año”, afirmó.

El presidente se dirigió directamente a los jóvenes, animándoles a ver más allá de la narrativa tradicional, a menudo limitada, de la historia sarda, para construir un futuro en el que Cerdeña pueda desempeñar un papel activo y consciente no sólo en el Mediterráneo, sino en todo el contexto europeo. y global. Recordó a los grandes pensadores sardos del pasado, como Domenico Alberto Azuni y Giovanni Maria Angioy, cuyas visiones de la Ilustración todavía podrían inspirar reformas e ideas innovadoras en la actualidad. El argumento central del discurso del presidente Todde fue la necesidad de redescubrir y reevaluar nuestro patrimonio histórico y cultural no sólo como una memoria, sino como una brújula para el futuro. “Nuestro pacto generacional se ha roto y podemos reconstruirlo a través del conocimiento de nuestra historia que nos ayude a crear una nueva conciencia colectiva común”, afirmó, subrayando la importancia de un diálogo intergeneracional renovado y vigoroso.

Este 28 de abril, mientras Cerdeña se refleja en el espejo de su historia, es apropiado preguntarnos cómo podemos, individual y colectivamente, contribuir a una narrativa inclusiva, productiva y anticipadora de un futuro más próspero y justo para todos. sardos. Sa Die de Sa Sardigna nos recuerda que tenemos no sólo el derecho, sino el deber de celebrarnos a nosotros mismos y a nuestra historia, no con una nostalgia paralizante, sino como un compromiso activo con la mejora y el crecimiento continuos. Con este espíritu, hoy no es sólo una celebración, sino también un compromiso cívico y cultural renovado que invita a todos los sardos a contribuir con valentía y determinación a construir el futuro de nuestra querida isla.

PREV Festival de la Canción de Eurovisión 2024, qué pasó anoche en la final y quién ganó. VIDEO
NEXT Rotary Club Fabriano: Reunión de presentación de la Fundación Salesi