Israel podría aceptar un acuerdo de tregua con Hamás que prevea la liberación de al menos 33 rehenes, entre ellos mujeres, ancianos y heridos. O entrar en Rafah con el ejército. En esta encrucijada concluyeron el viernes las conversaciones entre Israel y la delegación egipcia para un acuerdo sobre los rehenes y un alto el fuego en Gaza. En declaraciones a los medios de comunicación, fuentes israelíes calificaron las conversaciones de “muy buenas”, que habían permitido “progresos”.
Un alto funcionario israelí dijo al canal de televisión israelí Canal 12 (Keshet 12) que “ésta es la última oportunidad” de llegar a un acuerdo “antes de que el ejército entre en Rafah”. Por tanto, Israel dejó claro a los egipcios que no permitirá que Hamás pierda el tiempo impidiendo la operación militar en la ciudad de la frontera sur de la Franja.
“No permitiremos que Hamás hable de 20 rehenes como lo hizo anteriormente”, subrayó la fuente al Canal 12. El funcionario añadió luego que el Estado judío está dispuesto a hacer concesiones importantes, como el regreso de los palestinos al norte de Gaza y la retirada del ejército del corredor Netzarim que divide la Franja en dos.
El número de 33 rehenes implicados en la negociación no parece casual. Según la inteligencia israelí, esta sería la cifra de secuestrados que siguen con vida de los 133 que siguen en manos de Hamás desde el pasado 7 de octubre, día del ataque.
En las últimas semanas, funcionarios estadounidenses también habían dicho al periódico estadounidense Wall Street Journal que temían que muchos de los rehenes israelíes en Gaza estuvieran muertos.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, portavoz de la oposición estadounidense al bombardeo en Rafah sin un desplazamiento previo, masivo y necesario de civiles, también está a punto de regresar a Israel una vez más para discutir todo el expediente. El jefe del Departamento de Estado no llegará hasta el martes, mientras que durante el fin de semana la guerra en Gaza estará en la agenda de diplomáticos árabes, estadounidenses y europeos y de funcionarios de la ONU reunidos en el Foro Económico Mundial en Riad, Arabia Saudita.
Mientras tanto, el conflicto se intensifica en la frontera norte de Israel: las fuerzas armadas del Estado judío han anunciado que han matado a un destacado miembro de la Jamaa Islamyia, Mosab Khalaf, en un ataque dirigido con drones mientras conducía su coche por una carretera. Autopista cerca de Meidoun, en el distrito de Beqaa occidental, uno de los bastiones de Hezbollah en el sur del Líbano.
