La NASA se asocia con empresas comerciales para brindar transporte seguro, confiable y rentable de carga y miembros de la tripulación hacia y desde la Estación Espacial Internacional. La estación, una plataforma para la investigación de larga duración en microgravedad, ha funcionado continuamente durante más de 23 años, y los miembros de su tripulación han realizado una amplia gama de demostraciones tecnológicas y miles de experimentos en muchos campos científicos.
El Programa de Tripulación Comercial de la NASA proporciona sistemas capaces de transportar astronautas a la órbita terrestre baja y a la estación espacial a través de socios industriales que diseñan, construyen, prueban y operan estos sistemas. Una de las ventajas únicas del laboratorio orbital es que los miembros de la tripulación participan activamente en la investigación científica. Los operadores humanos monitorean eventos en la Tierra en tiempo real, intercambian muestras experimentales, observan resultados de primera mano, evalúan cuándo las condiciones son favorables para la recopilación de datos y solucionan problemas y gestionan y mantienen actividades científicas. Los miembros de la tripulación también empacan muestras de experimentos para regresarlas al suelo para su análisis detallado.
El socio comercial de la NASA, Boeing, lanzará a los astronautas de la NASA Butch Wilmore y Suni Williams en una prueba de vuelo con tripulación de su nave espacial Starliner en mayo de 2024. La nave espacial se lanza a la estación espacial en un cohete Atlas V de United Launch Alliance desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, Florida. Esta misión allana el camino para que la NASA certifique la nave espacial Starliner para misiones de rotación de larga duración a la estación espacial.
SpaceX, otro socio comercial, realizó un vuelo Demo-1 sin tripulación en marzo de 2019, y en mayo de 2020, el vuelo Demo-2 llevó a los astronautas de la NASA Robert Behnken y Douglas Hurley a la estación espacial. La primera misión operativa, Crew-1, se lanzó en noviembre de 2020. Desde entonces, SpaceX ha enviado periódicamente tripulaciones al laboratorio orbital para misiones científicas. La nave espacial Dragon se lanza en el cohete Falcon 9 de la compañía desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida.
Los vuelos comerciales con tripulación de la NASA han aumentado significativamente la cantidad de tiempo de la tripulación disponible para la investigación y han ampliado el potencial de uso comercial del laboratorio orbital. Más miembros de la tripulación significan más tiempo para la investigación científica y las demostraciones tecnológicas y, en última instancia, más resultados científicos. Hasta la fecha, los resultados generados por la investigación de la estación espacial van desde mejoras en el desarrollo de productos farmacéuticos hasta una mejor respuesta a desastres, una mejor fabricación de materiales, avances en robótica, bioimpresión de tejido humano y más.
Al permitir la rotación regular de los miembros de la tripulación, los vuelos comerciales con tripulación también contribuyen a la investigación sobre cómo las misiones de larga duración afectan la salud humana, ayudando a preparar las misiones de exploración a la Luna y Marte.
A través del programa de Servicios de Reabastecimiento Comercial de la NASA, los socios SpaceX y Northrop Grumman transportan carga a la estación espacial en cohetes y naves espaciales que desarrollaron las compañías.
Northrop Grumman transporta investigaciones científicas y carga en su nave espacial Cygnus. La primera misión de reabastecimiento de la compañía se lanzó en 2013 y había alcanzado 20 misiones en enero de 2024. Cuando un Cygnus sale de la estación espacial, elimina varios miles de libras de desechos que se queman durante el reingreso a la atmósfera terrestre.
Las naves espaciales Cygnus que salen también proporcionan plataformas seguras para realizar investigaciones que podrían crear peligros si se realizan en la estación espacial, como los experimentos de seguridad contra incendios de naves espaciales (Saffire). Esta serie de investigaciones de ocho años estudió el crecimiento de las llamas y la inflamabilidad de los materiales en el espacio. Los experimentos se encendieron en los vehículos de carga después de su salida de la estación y antes de su reingreso a la Tierra, evitando riesgos potenciales para la estación espacial y su tripulación.
SpaceX lanzó su primera misión de carga Dragon en octubre de 2012 y, en marzo de 2024, había enviado 30 misiones comerciales de servicios de reabastecimiento a la estación espacial. Dragon es una nave espacial reutilizable que también devuelve muestras de investigaciones científicas realizadas en la estación espacial. A partir de 2021, estos vuelos de regreso comenzaron a aterrizar cerca de Kennedy en lugar de hacerlo en el Océano Pacífico. Esta capacidad permite a los científicos acceder rápidamente a las muestras para realizar observaciones y análisis adicionales antes de que los efectos de la gravedad vuelvan a aparecer por completo. Muchos investigadores también realizan análisis más profundos posteriormente en sus laboratorios locales.
La NASA también está trabajando con Sierra Space para desarrollar la nave espacial Dream Chaser para transportar carga hacia y desde la estación espacial. La nave espacial con alas reutilizable está diseñada para utilizar pistas comerciales y su carga está sujeta a fuerzas gravitacionales reducidas en el vuelo de regreso. Sierra Space realizó un vuelo de prueba atmosférico autónomo en 2017.
Estas asociaciones comerciales construyen una fuerte industria espacial comercial estadounidense, mientras la NASA se concentra en desarrollar la próxima generación de cohetes y naves espaciales para misiones al espacio profundo y en llevar a la Luna a la primera mujer y a la primera persona de color.
Melissa Gaskill
Equipo de comunicaciones de investigación de la Estación Espacial Internacional
Centro espacial Johnson de la NASA
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