Ferrari Roma Spider, el regreso del techo de lona

Ferrari Roma Spider, el regreso del techo de lona
Ferrari Roma Spider, el regreso del techo de lona

Allá ferrari roma se agrega a larga lista de modelos de Cavallino Rampante también ofrecidos en versiones al aire libre. Lo hace siguiendo una ruta tradicional ahora abandonada por la mayoría de los fabricantes, la del techo de lona retráctil. Bajo el capó, el tradicional V8 de 3.9 litros y 620 caballos de fuerza de potencia, desprovisto de cualquier tipo de electrificación. El peso crece, pero se mantiene bajo control: en la báscula el Roma Spider puntúa solo 84 kg más que el cupé. Para viajar con el viento en tu cabello sin sacrificar el rendimiento.

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El Cavallino se centra en la lona

Tras el Portofino, el 296 GTS, el F8 Spider y el 812 Aperta, aquí también entra en el club de los rojos el Ferrari Roma con el que viajar al aire libre. Con una solución técnica con una larga tradición, pero que ahora se ha vuelto inusual: el techo de lona que falta en un Ferrari desde los días del F430 Spider y el 599 SA. El techo eléctrico del Roma Spider se abre en 13,5 segundos, incluso a una velocidad de hasta 60 km/h, e incluye una gran luneta trasera de cristal. El sistema de plegado fue diseñado para ser lo más ligero y compacto posible, tanto que el maletero mantiene la elevada capacidad de 255 litros, frente a los 272 del coupé.

A nivel estético, el Roma Spider se mantiene fiel al estilo del modelo de techo cerrado, integrando algunas soluciones para aligerar el diseño de la parte trasera. En particular, se ha insertado un elemento de contraste en el portón trasero que aligera la línea, ahora desprovista de la gran ventana trasera inclinada del coupé. También se ha mantenido la distribución de los interiores, configurados según la filosofía “dual cockpit”o la presencia de un sistema de infoentretenimiento a disposición del conductor y uno exclusivo para el pasajero.

Rendimiento Roma Spider, V8 y coupé

El Ferrari Roma Spider hereda íntegramente la mecánica del coupé, con las evidentes modificaciones necesarias para garantizar la correcta rigidez del chasis en ausencia de pilares en el techo. En particular, los técnicos de Cavallino se concentraron en reforzar el umbral, desarrollado específicamente para esta versión del GT. El aumento de peso se limitó a solo 84 kg, con el Roma Spider alcanzando los 1.556 kg en seco: la relación peso/potencia sigue siendo extremadamente favorable: 2,5 kg por caballo de fuerza.

Bajo el capó, el Roma Spider esconde un V8 de 3.9 litros con doble turbo, que entrega 620 caballos de fuerza y ​​760 Nm de torque. Prestaciones en línea con las del coupé: aceleración de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos, de 0 a 200 en 9,7 segundos y una velocidad máxima declarada de más de 320 por hora. Todavía no se ha declarado el precio del Roma Spider, que presumiblemente costará unos miles de euros frente a los 209.700 necesarios para poner el coupé en el garaje.

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