Recientemente, un equipo de físicos teóricos propuso una nueva solución al La paradoja del gato de Schrödingerlo que podría permitir que las teorías de la mecánica cuántica y la relatividad de Einstein coexistan de la mejor manera posible.
Nunca es fácil hablar de ciertos temas, sin embargo, en esta ocasión intentaremos “simplificar brutalmente” (tanto como sea posible) conceptos físicos verdaderamente avanzados y complejo. ¿Estas listo?
Para empezar, vale la pena recordar cómo las leyes de la física cuántica postulan que los objetos físicos pueden existir en una combinación de múltiples estados. Por tanto, les será posible estar en dos lugares al mismo tiempo o tener diferentes velocidades al mismo tiempo.
Por ello introducimos el concepto de “superposición“, según el cual un sistema permanece en este estado hasta que interactúa con un dispositivo de medición (es decir, se observa directamente), gracias a lo cual sólo tomará valores bien definidos como resultado de la propia medición. Un cambio tan brusco en el estado del sistema se denomina “colapsar“.
En este punto entra en juego el físico Erwin Schrödinger, quien resumió esta teoría en 1935 con su famosa paradoja del gato de Schrödinger, que él está simultáneamente vivo y muerto y del que ya os hemos hablado extensamente.
Las leyes cuánticas sin embargo, se aplican al reino de las partículas elementales.. De hecho, los objetos más grandes se comportan de acuerdo con la física clásica como lo predice teoría general de la relatividad por Einstein y nunca son observados en una superposición de estados.
Como señala el autor principal Matteo Carlesso, físico teórico de la Universidad de Trieste en Italia: “La pregunta es: es posible que el universo está en tal superposición? Las observaciones dicen que no: todo sigue las predicciones clásicas de la Relatividad General“. Entonces, ¿cómo podemos conciliar las dos cosas?
Para abordar el problema, los investigadores propusieron modificaciones a la ecuación de Schrödingerque rige cómo todos los estados, incluidos los de superposición, evolucionan con el tiempo.
Específicamente, el equipo agregó términos a la ecuación que capturaban cómo el sistema interactúa consigo mismo. Luego se eliminó la distinción entre objetos sujetos a medición y dispositivos de medición, proponiendo que el estado de cada sistema sufre un colapso espontáneo a intervalos regulares.
“Sin ninguna acción de entidades externas, cualquier sistema se localiza (o colapsa) espontáneamente en un estado particular. Parafrasear, en lugar de tener un gato vivo Y muerto, lo encuentras vivo O muerto“, dijo Carlesso. Para los más curiosos, pueden encontrar el artículo completo en el siguiente enlace.
“Nuestro modelo describe un universo cuántico, que finalmente colapsó y por lo tanto se volvió efectivamente clásico“, declaró el propio Carlesso.
Tras ver el ‘descubrimiento que transformará el mundo’ y aunque esta teoría explica por qué el universo puede regirse por las leyes clásicas de la física, probar la teoría experimentalmente en sí, no será tan simple.
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