
“Somos todos culpableincapaz y negligenteporque todos, no solo los Tomadores de decisiones, actuamos en base a lo que la ciencia, la conciencia y el conocimiento nos brindaron en esos dramáticos momentos”. están del lado de la administradores y de la expertos sanitario terminó siendo investigado el presidente de Fadoila sociedad científica de medicina interna, Francisco Dentaly el presidente de la Base Fadoi, Darío Manfellotquienes juzgan “los resultados del cierre de las investigaciones de la Fiscalía de Bérgamo en el que se le acusa en diversas calidades de delitos como homicidio involuntario y epidemia miembros culpables de la antigua Gobiernos y algunos de los principales expertos y médicos de la sanidad italiana, cuya profesionalidad es reconocida y apreciada en todo el mundo y a quienes nuestro solidaridad total“. En la investigación del fiscal de Bérgamo el entonces primer ministro está bajo investigación jose conte y el exministro de Salud roberto esperanzael recién reconfirmado presidente de Lombardía atilio Fuente y su ex asesor de bienestar, Julio Gallera, quedó fuera del Consejo Regional. Pero la lista de sospechosos también incluye a varios directivos clave del Ministerio de Salud, no todos ex; el presidente de la ISS Silvio Brusaferro; el coordinador de los primeros Cts Agostino Miozzo; el entonces jefe de la Defensa Civil Ángel Borrelli y el presidente del Consejo Superior de Salud Frank Locatelli.
Los dos representantes de la internistas hospitalariosque atendió al 70% de los pacientes en sus salas COVID-19defender el trabajo de quienes se han encontrado tomando decisiones en el acto, sin poder referirse a precedentes similaresen una situación desconocido Y impredecible. “En tres años y más en 2020, en esas primeras semanas en que estalló la pandemia en Italia, navegando en la oscuridad ante una emergencia desconocida, dedicamos todas nuestras actividades sin límites de tiempo, con una Me comprometo que lo abarca todo y con cientos de muertes entre medicos Y trabajadores de la salud“. “Solo en Italia hay una iniciativa judicial de este tipo”, observan Dental Y Manfellot. “Somos nosotros entonces más elegantemás puro, más corregido?” ellos preguntan. “Allá judicial italiano ¿Es ella la mejor del mundo porque es la única que descubrió los errores? Pero olvidamos que el pandemia ¿ha afectado a todo el mundo y que Italia haya sido el primer país en ser desbordado? Si es así, es inútil esconderse detrás de un dedo: todos somos culpable – repiten – La internistas italianos son culpables de trabajar las 24 horas del día para hacer frente a la pandemia con las armas que teníamos a nuestra disposición.
Además de internistas, escribe La impresiónel presidente de la Orden Medici también toma el campo junto a los sospechosos de la oficina del fiscal de Bérgamo, Felipe Anillos, según el cual, más que acusar, “el país debería agradecer a quienes en ese momento tuvieron que tomar decisiones difíciles frente a un enemigo desconocido”. Él toma el lado de gobierno, cts, esMinisterio de Sanidad y Región Lombardia También Alejandro Vergalopresidente de la asociación de anestesiólogos Aacoi. Siempre hablando con La impresión, Vergalo subraya que “las acusaciones inherentes a los autos de la acusación, tal como los medios de comunicación, nos dejan sorprendido“. Y subraya que no son los médicos los que no tienen nada que reprocharse, sino también los politicos ellos administradores quienes se encontraron “actuando y tomando decisiones difíciles contra un virus absolutamente desconocido”. Pasando al fondo de las controversias, Vergalo continúa: “Sobre el hecho de que el plan para la pandemia no se hubiera actualizado, el poder judicial establecerá si hubo responsabilidades, pero tengo muchas dudas de que, como afirma el fiscal de Bérgamo, hubiera estado bien aplicar el viejo plan de la gripe de todos modos, cuando nos enfrentábamos a un problema mucho más más contagioso y letal que el de la gripe”.
Sorprendido también por las conclusiones de los magistrados, el profesor Lucas Richeldi, neumólogo del Policlínico Gemelli de Roma, experto en enfermedades del sistema respiratorio y miembro del primer comité técnico-científico “implicado – precisa – el 28 de febrero de 2020”. Para Richeldi es “una investigación basada en retrospectiva. Nunca esperé una iniciativa judicial – explica en entrevista con La impresión – lo que viola un principio básico de la medicina y de la ciencia, a saber, que las decisiones se toman en un momento dado, con base en los elementos disponibles”. “Me sorprende ahora ver a estimados colegas acusados de asesinato”. Cuando se le preguntó acerca de una posible subestimación de la situación en Val Seriana, Richeldi reitera que “nadie tiene subestimadopasábamos horas y horas examinando cualquier dato o señal que nos llamara la atención – responde – Siempre ha existido la mayor sensación de precaución dirigir la actividad de ctsante una situación impredecible Y dramático“. Y cree que las alegaciones formuladas por la fiscalía de Bérgamo se basan “en lo que vimos pasar después – continúa – Todos recordamos la incertidumbre inicial opuesta a la COVID-19nadie sabía nada, le conocimiento progresaron día a día. Mira, no veo un crimen en este asunto, una acción legal No la entiendo”. En cuanto a errores que se han cometido, explica: “Todos hemos cometido errores, y varias veces. Pero donde esta el malicia? Me pregunto esto como médico, más que como exmiembro de los Cts: los expertos hemos cometido errores y los cometo todos los días en el hospital. El mismo paciente, al que traté el año pasado, hoy quizás lo trataría diferente, porque hay nuevas terapias e información. En verdad, el mejor médico es el que menos errores comete”. Ese error, según el informes pericialeshabría matado a miles de personas. “Realmente me choca ver a mis compañeros acusados de homicidio múltiple -observa- Gente que en esos meses puso cuerpo y alma en intentar salvar la mayor cantidad de vidas posible: hay quienes están siendo investigados por el papel que desempeñaron. , por lo que asumió. Me parece muy poco generoso”.
Richeldi se refiere tanto a expertos como a políticos, porque “¿cómo se puede cuestionar la voluntad del presidente de salvar vidas del Instituto Superior de Salud o del Presidente del Consejo? Me parece realmente irreal suponer que, teniendo claras consecuencias, hemos optado por causar miles de muertos para no cerrar actividades económicas. me puedes decir otro Aldea en que se inició una investigación de este tipo?”, remarca. Una pregunta a la que él mismo se responde: “Nadie. Pero en todas partes ha habido errores de juicio, muchas cosas que debían hacerse de manera diferente. Llevar Inglaterra – sugiere el profesor – que no nos siguió durante tres semanas, a pesar de haber visto lo que nos pasaba. No sé si se ha abierto una investigación contra el primer ministro. Johnson y quien lo recomendó. Es un hecho, sin embargo, que la estrategia italiana resultó ser la mejor y por eso fue luego imitada por las demás”. Ni siquiera en la elección de la zona roja a nembro Y Crían Lombardo se podria haber hecho mejor? “Por supuesto, también podríamos haber anticipado el confinamiento –responde– para cerrar todo Italia el 20 de febreroel día que descubrimos al “paciente 1” un Codoño. ¿Sabes cuántos miles de muertes hubiésemos evitado? Pero si hubiera propuesto esta solución el 20 de febrero, cuando aún no sabíamos nada de lo que nos esperaba, me habrían pensado que estaba loco”.