HELSINKI (Reuters) – Las perspectivas de que el Banco Central Europeo recorte los tipos de interés en junio suponen que no habrá más reveses en la situación geopolítica que afecta a los precios de la energía y, por tanto, a la inflación.
Así lo afirmó el asesor del BCE, Olli Rehn.
La semana pasada, el BCE habló abiertamente sobre la posibilidad de un recorte de tipos en junio y el gobernador del banco central finlandés, Rehn, destacó que el requisito previo para tal decisión es que la inflación se desacelere como se esperaba.
“Esto supone que no haya más contratiempos, por ejemplo en la situación geopolítica y, por tanto, en los precios de la energía”, afirmó en un comunicado, en referencia a Oriente Medio y Rusia.
Algunos colegas de Rehn ya se han pronunciado a favor de nuevos recortes de tipos después de junio, pero Rehn no hizo comentarios al respecto.
“El BCE toma sus decisiones sobre tipos de interés reunión tras reunión a la luz de la información más reciente, sin atarse de antemano a ningún tipo de interés específico”, añadió.
(Traducido por Chiara Scarciglia, editado por Stefano Bernabei)
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