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7.5
¿Cómo contar el universo de Tolkien y la mitología de Arda de una manera nueva? ¿Y cómo hacer para que la nueva ola del heavy metal tradicional vuelva a ser original y divertida? Esta vez, tomándonos de la mano y guiándonos por las páginas más lúgubres del “Silmarillion” y “El Señor de los Anillos” están Morgul Blade, una banda de Filadelfia que por el nombre, portada y título del disco, “ Heavy Metal Wraiths”, parece querer definir un auténtico manifiesto. Sin duda uno de los nombres más intrigantes e impactantes que nos hemos topado en este entorno desde hace bastante tiempo, con un título que, seamos claros, ya es toda una declaración de intenciones: el grupo liderado por Lord Klauf y por Wil Specter, tras el excelente “Fell Sorcery Abounds” de 2021, demuestra que sabe perfectamente combinar una imaginería cercana a la hábilmente historiada de forma más extrema por Summoning con el heavy más duro y el más épico.
Si el rápido “Eagle Strike” y el rítmico “Beneath The Black Sails” ya se caracterizan por un excelente equilibrio entre el grito de Klauf y el sintetizador de mazmorra de Spectre, es también gracias a la entrada de Jim Viola al bajo, ya en el sorprendente Wild Beyond. – y Elyse NightHawk de Heavy Temple, quien logra crear una mezcla explosiva que combina metal épico y negro.
Sin andarnos mucho con rodeos: el track que da nombre al trabajo mola mucho y es probablemente una de las cosas más hermosas que hemos escuchado en este género en mucho tiempo, sin mencionar el arrebato de black metal que comienza. con “Frostwyrm Cavalry” y luego evoluciona hacia una pausa casi lírica donde sólo dominan el bajo y la guitarra.
La historia de Arda, como ya habrás adivinado, está contada desde el lado de los malos, porque después del momento lírico lleno de patetismo de “Widow’s Lament”, le toca a Ungoliant tomar el micrófono en “Spider God”, caracterizado por un riff realmente asesino y que “la raza de los hombres ha fracasado” gruñó hacia el final de la pista que no te impedirá levantar los cuernos al cielo.
Los estallidos de blast beat siguen dominando incluso en los siguientes temas, a excepción de los dos sintetizadores de mazmorra “A Welcoming Heart” y el final “The Last Line of Kings”, aunque la pieza interpretada por toda la banda que cierra el álbum “Ni Cruz Ni Corona”, es una invitación a rebelarse contra religiones y reyes, más acorde con una filosofía ancestral del heavy metal.
Es sorprendente cómo Morgul Blade siempre son capaces de combinar diferentes aspectos de nuestra querida música manteniendo un equilibrio perfecto que probablemente agradará a casi todos, desde los coros hasta las marchas solemnes y pasando por los estallidos de tormenta que seguramente habrán azotado a los Rostros de los elfos guiados por Feanor en Helcaraxë.
El único defecto del álbum es que tiene una duración de poco más de media hora, siendo tres de cada diez canciones esencialmente interludios instrumentales, pero no se puede negar que “Heavy Metal Wraiths” es sin duda uno de los trabajos más interesantes en este campo. NWOTHM de los últimos años, haciendo que Morgul Blade supere a lo grande el obstáculo del segundo álbum de estudio.
