(ANSA) – CAGLIARI, 01 DE MARZO – Al menos 3.100 puestos de trabajo directos están en juego en Cerdeña en los préstamos subestándar del superbonus, de los cuales 2.850 en las pymes de construcción artesanal, este último sector que sufriría una contracción del 9,1% de los empleados . Pero el recuento total de puestos que corren el riesgo de tener que hacer frente a despidos y pérdida de empleo en los próximos días alcanza las 7 mil unidades entre empresas directas y vinculadas.
Grave situación que también podría repercutir en los territorios: en la zona de Sassari-Gallura, sólo en las obras de construcción, se estima que están en riesgo 1.010 plazas, en Cagliari 760, en el sur de Cerdeña 520, en Nuoro 330 y en Oristano 220. Son las estimaciones de la ‘Oficina de Estudios de Confartigianato Cerdeña, que ha elaborado un análisis sobre “Empleados en riesgo en las industrias de la construcción en Cerdeña debido a la incobrabilidad de préstamos deficientes para bonos de construcción”, basado en datos de Istat y Mef.
Sobre estas hipótesis, Confartigianato Imprese Sardegna, con la presidenta regional, Maria Amelia Lai, y con el presidente de los gremios de la construcción, Giacomo Meloni, no da vueltas al problema: “Nos jugamos con los bonos de construcción para el empleo y el futuro si el decreto del Gobierno que ha sumido en la incertidumbre a miles de empresas -dicen-, por eso hay que encontrar soluciones urgentes a la situación de las empresas con créditos que, día tras día, de varados van quedando sin valor y por tanto incobrables”.
La asociación también destaca que en las pequeñas y medianas empresas constructoras, sector que ha registrado un aumento de la productividad del 5,8%, el doble del 2,6% del total de la economía, se emplea al 87,2% de los trabajadores. Además, el sector de la construcción es el sector que absorbió el 85,5% de los puestos de trabajo creados en 2022.
“Es inadmisible sancionar a las empresas que son las únicas culpables de haber hecho uso de la ley, llevado a cabo las intervenciones minuciosamente previstas por la legislación, aplicado las listas de precios regionales, soportado enormes cargas burocráticas -continúan Lai y Meloni- por no hablar de haberse enfrentado los 224 cambios, uno cada 16 días. Los datos muestran cómo la economía sarda luchará para hacer frente a esta parada repentina”. (MANEJAR).