Una cita para todos y el campamento se disolvió. El sentido común se impuso en via Patini. Después de nuestros artículos en los que mostrábamos y contábamos cómo solicitar documentos de protección humanitaria, el exterior de las oficinas de via Patini se había transformado en un verdadero pueblo de desesperación, intervino la Jefatura de Policía.
Así que ayer, entre la mañana y la tarde, todos los presentes consiguieron su cita gracias a la cual podrán presentarse en Tor Sapienza un día preestablecido sin tener que someterse a monstruosas colas, iniciadas la noche anterior, transformados en ciudades de tiendas de campaña gracias a la lluvia.
Un “aterrizaje burocrático” se ha vuelto imposible para estos inmigrantes. Una situación en la que, como documentaba el informe de ayer, se colaban los habituales profesionales de la ilegalidad, dispuestos a pedir dinero a los migrantes, a cambio de un supuesto atajo para conseguir los documentos. Una denuncia también llevada a la mesa del ACNUR.
La lluvia que cae sobre Roma desde el pasado domingo ha aumentado la emergencia. De hecho, desde el domingo por la noche, como habíamos documentado en un video anterior, cientos de migrantes hicieron fila y usaron lonas de todo tipo para protegerse del agua. De modo que esa cola invisible durante semanas se ha convertido en una emergencia. Ayer se espera que la intervención de la comisaría sea decisiva.