Inventamos otro momento para reunirnos, jugar todos juntos e intentar compartir dos días de sana y pura diversión. El sábado 8 y domingo 9 de junio recordamos a nuestro amigo Andrea Turrini, conocido por todos como Gasparo. Casi 500 personas, muchos niños, muchas sonrisas en estos dos días de deporte, diversión y pura locura
Nos encontramos en Saliceta San Giuliano y fuimos testigos de un emocionante torneo de fútbol sala en dos campos de césped sintético, 7 equipos de fútbol feroces con un cuchillo entre los dientes para ganar el trofeo final. Equipos formados por los que alguna vez fueron niños, los que aún lo son y deportistas de mayor o menor rendimiento. Al sonar el pitido inicial se produjo una tensión muy alta que poco a poco se disolvió entre los kebabs y los borlenghi.
La verdad es que vimos muchas barrigas, muchas canas pero también unas ganas enormes de compartir juntos algo cuyo significado último nunca es tan banal como la solidaridad.
Una de las mayores satisfacciones fue ver a los niños divertirse, a los padres relajándose frente a una cerveza y muchas, muchas risas. Por este motivo, debemos agradecer a todos los voluntarios, a las numerosas personas que contribuyeron a la realización del torneo, al rincón gastronómico, a la celebración de la lotería del domingo por la tarde y a la subasta benéfica del sábado por la noche. ¡Música, ironía y deporte en un tríptico casi perfecto!
A lo largo de los años hemos conocido muchas asociaciones de voluntariado, organizaciones que cada día se prestan a ayudar a los demás y en esta misma ocasión hacer un lindo regalo a uno de ellos, como siempre ha sucedido en años pasados, nos llena de mucho orgullo.
Al final poco importa el resultado deportivo, poco importa ganar, se gana cuando, en memoria de un amigo fallecido, se consigue también perseguir fines caritativos.
Querido Gasparo, todavía tienes muchos amigos que te quieren: nadie te olvidará jamás.
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