Génova logró merecidamente su objetivo de supervivencia. El equipo de Alberto Gilardino, que devolvió al Grifone a la máxima categoría, vive un momento de oro como lo demuestran los 46 puntos sumados hasta el momento. El Génova, como también escribe Il Secolo XIX, no alcanzaba este umbral de puntos desde la temporada 2015-2016, cuando Gianpiero Gasperini terminó en el undécimo lugar con 46 puntos para los rossoblu. Y Gilardino, que impresionó en su primera experiencia como entrenador en la máxima categoría, quiere seguir los pasos de Gasp.
Su Génova sumó 25 puntos sólo en la segunda mitad de la temporada, elevando a once su cuenta de victorias después de la excelente actuación contra el Sassuolo en los Ferrari. El sueño de Gila, sin embargo, parece ser el de querer superar la barrera de los 50 puntos, un objetivo alcanzable al final de la temporada. El Génova, sin embargo, en los próximos partidos contra la Roma y el Bolonia, podría llegar aún más lejos, superando la cuota histórica de 51 alcanzada por Gasperini en 2010 y Ballardini en 2011. Objetivos al alcance de un Génova sano y bonito a la vista.
