Lamba: “Hagámoslo mejor juntos”

El arzobispo Riccardo Lamba toma posesión de la cátedra en la catedral de Udine

«Probaré la misma alegría de la que habla Jesús en el Evangelio, si permanecemos en su Amor… ¡todos juntos! Ducj juntos! ¡Vsi skupaj! Wir alle gemeinsam». Así lo aseguró, en palabras de la diócesis de Udine, el nuevo arzobispo, Riccardo Lamba, que el domingo pasado, en la catedral de la capital friulana, recibió el cuidado pastoral del administrador apostólico, monseñor Andrea Bruno Mazzocato. «Bendito el que viene en nombre del Señor – fue el deseo de Mazzocato -. Es un traspaso entre dos servidores de Cristo y de la Iglesia. Así somos nosotros los obispos. Con mucho gusto pongo en tus manos y en tu corazón esta Iglesia friulana, a la que he amado y he tratado de servir como pude”. En la catedral de Udine, repleta de 2.000 fieles, se rezó y cantó en friulano, italiano, alemán, esloveno y latín. Estuvieron presentes catorce obispos, entre ellos el patriarca de Venecia Francesco Moraglia y los titulares de las diócesis de Ljubljana y Koper, y tres obispos auxiliares del Vicariato de Roma. En Piazza Libertà, el nuevo prelado fue acogido calurosamente por los jóvenes de numerosas parroquias, con pancartas y carteles. «Don Riccardo», como lo llamaron inmediatamente, puso – desde su teléfono móvil – la banda sonora de la película sobre San Felipe Neri, Prefiero el paraíso. Luego los jóvenes lo acompañaron a pie hasta la Catedral. Después de un cálido abrazo con su predecesor Mazzocato, Lamba recibió la bienvenida del alcalde Alberto Felice De Toni, quien le aseguró: «Aquí estoy seguro de que se encontrará en casa», recordando entre otras cosas las profundas raíces de fe de esta tierra y de estos pueblos herederos de la Iglesia Madre de Aquileia. Y en la homilía, Roman Lamba admitió que “aquí se respira el aire de Europa Central”. Y en este punto intentó responder a esa pregunta, expresada en friulano: «Pero, ¿a quién le predices que hará el Vescul en Udin el viernes?». Y lo hizo abriendo “el cofre del tesoro de mi vida”, recorriendo algunos pasajes en los que – afirmó – Dios mismo eligió el camino de su existencia. En el centro de la homilía estuvieron las palabras inspiradas en las lecturas del día, en particular el Evangelio de Juan. «Quisiera partir – dijo Lamba – de la expresión que encontramos en labios de Jesús en el Evangelio de Juan: “No me habéis elegido a mí, sino que yo os he elegido a vosotros”». «Dios me eligió a mí, sólo a mí. Dios os ha elegido a cada uno de vosotros, única y exclusivamente por amor”. Y por eso, continuando con sus reflexiones, añadió que estaba «seguro de que también aquí, en esta tierra friulana que tiene los símbolos de la tradición cristiana grabados en piedra y los valores de la fe inscritos en el corazón de un pueblo, Todavía saborearé la misma alegría de la que habla Jesús en el Evangelio, y todos la saborearemos. Con una condición – insistió – que lo haremos todos juntos”. «Caminar juntos, a buen paso», reiteró el concepto, al final de la celebración, del Patriarca Moraglia. «Este es un momento de gracia no sólo para la Iglesia de Udine sino para todas las Iglesias del Nordeste – reconoció -. La rotación de un pastor es un acontecimiento eclesial que se vive en la fe. En nuestras historias personales y en las que cuentan nuestras comunidades, todo esto adquiere un valor particular en los tiempos del camino sinodal”. Y luego “gracias al obispo Andrea Bruno, que sirvió con fidelidad a esta Iglesia, un hermano significativo para la Conferencia Episcopal, un pastor sabio, desinteresado y valiente”, reconoció Moraglia.

NEXT Abel Balbo jugó de centrocampista cuando era niño. Un Scudetto con la Roma, copas en Parma