La tragedia se produjo entre los transeúntes, en uno de los puntos más transitados de la zona de acceso a la ciudad de Venecia. Giorgio Serena, informante científico de unos 57 años, residente en Mogliano Veneto, perdió la vida la mañana del lunes 6 de mayo en Piazzale Roma, justo al pie del puente de Calatrava. El hombre vivía a lo largo del Terraglio y deja atrás a un hijo pequeño y a su esposa, Valentina Poletti, farmacéutica en Musile di Piave. También deja atrás a un hermano, Roberto, un conocido fotógrafo.
Eran alrededor de las 11.30 horas cuando se dio la alarma. Según una reconstrucción inicial, parece que el hombre se sintió mal y cayó al suelo. Otras personas que se encontraban cerca alertaron inmediatamente a la Policía local y al 118, que envió un equipo de rescate al lugar.
Los rescatistas comenzaron las operaciones para salvarle la vida, dándole un masaje cardíaco. Mientras tanto, los agentes se encargaron de mantener a distancia a los peatones, dirigiéndolos por diferentes rutas. Las maniobras de reanimación, sin embargo, fueron inútiles y el hombre fue declarado muerto poco después de las 12. “Estaba enfermo, lo desnudaron y le dieron un masaje, pero no se podía hacer nada”, informa un testigo. “Entonces el cuerpo “Estaba cubierto con un paño blanco y cinco agentes de la policía local vigilaban la situación”.