Nino Baglieri vive desde hace casi 39 años clavado en la “cruz”, su silla de ruedas. Un accidente de trabajo a los 17 años lo dejó inmóvil y en su sufrimiento encontró la conversión, “la “Luz”. Sólo mueve la cabeza y descubre que puede escribir con la boca, este es el punto de inflexión de su vida, comienza a “escribir y comunicarse con el mundo”, cuando puede viaja y conoce gente, testimoniando a todos la alegría. de vivir, sacrificándose diariamente con su sufrimiento, por el bien de los demás.
En 1996 eligió vivir su vida como consagrado, y lo hizo uniéndose a la Familia Salesiana como voluntario con Don Bosco, un grupo de laicos salesianos consagrados que viven el carisma de Don Bosco donde viven, a través de su trabajo.
Cinco años después de su muerte, en marzo de 2012 se inauguró oficialmente la Causa de Beatificación y Canonización, con una gran celebración en Noto y Modica, con más de 3.000 jóvenes de toda Sicilia. Todo ello siguiendo las disposiciones de la Constitución Apostólica Divinus Perfectionis Magister del 25 de enero de 1983, aprobada y ratificada por Juan Pablo II, y observada por todos los obispos que preparan las causas de canonización. Durante la fase diocesana del Proceso se procedió a escuchar a quienes lo conocieron y entraron en contacto con el Siervo de Dios. Se recogieron muchos testimonios y se enviaron cartas a todas partes, con el objetivo de reconocer el carácter heroico de las virtudes.
Hoy concluyó la “fase diocesana” del Siervo de Dios Nino Baglieri. Monseñor Salvatore Rumeo, obispo de la diócesis de Noto, presidió la ceremonia que tuvo lugar en la ciudad natal del siervo de Dios, Modica, en la iglesia de San Pietro. De hecho, se ha producido la entrega oficial de los documentos adquiridos en esta primera fase diocesana, y en adelante se abrirá la “fase romana”, con vistas a la Venerabilidad y Beatificación.
