El propio presidente de la Fed, Jerome Powell, afirmó ayer que “hasta ahora los datos no nos han dado mucha confianza”, añadiendo que “es probable que alcanzar una mayor confianza tarde más de lo esperado”.
Sin embargo, Powell añadió que “es poco probable que el próximo movimiento en la tasa de referencia sea un aumento”.
En su reunión anterior de marzo, la Reserva Federal se ciñó a una proyección de tres recortes de tipos para finales de 2024, incluso cuando decidió mantener los tipos de interés estables por quinta vez consecutiva.
La inflación ha caído significativamente desde un máximo del 9,1%, pero sigue estando más de un punto porcentual por encima de la tasa objetivo de la Reserva Federal del 2%.
Los recortes de las tasas de interés reducirían los costos de endeudamiento para los consumidores y las empresas, lo que podría desencadenar una explosión de la actividad económica a través de un mayor gasto de los hogares y la inversión empresarial.
La economía estadounidense se desaceleró drásticamente a principios de 2024, aunque siguió creciendo a un ritmo fuerte, según datos publicados por el Departamento de Comercio de Estados Unidos la semana pasada.
El producto interno bruto, una medida de todos los bienes y servicios producidos en la economía, registró un crecimiento anual del 1,6% en los primeros tres meses del año, dijo esta semana el Departamento de Comercio.
Esta cifra estuvo muy por debajo de las expectativas y marcó una fuerte desaceleración con respecto a la tasa anual del 3,4% medida en el último trimestre del año pasado.