La diócesis de Rimini tiene un nuevo sacerdote. Don Paolo Marasco, de 40 años, misionero diocesano en Berat, Albania, con la comunidad de la Pequeña Familia de la Asunción de Montetauro, fue ordenado sacerdote el jueves en la tierra de las Águilas, en Lushnje. Estuvieron presentes en su sí, recibidos por las manos de Mons. Giovanni Peragine, administrador apostólico del sur de Albania, del obispo de Rímini, monseñor Nicolo Anselmi, de 80 sacerdotes, entre ellos varios de Rímini, de amigos y de un nutrido grupo de la comunidad de Montetauro, donde creció Don Paolo. conciencia de la fe y de su ministerio.
Se trata de la primera ordenación que se realiza en el Vicariato Apostólico del sur de Albania, desde su creación en 1938. En este vasto territorio hay sólo 3.000 católicos, el 0,2% de la población. Don Paolo vive en Berat con su comunidad monástica y algunas personas discapacitadas que le han sido confiadas. En los próximos días don Marasco se reunirá también con una decena de representantes de la comunidad islámica, con quienes mantiene relaciones amistosas. Don Paolo, de hecho, partió como misionero para el vicariato del sur de Albania en 2015. Aprendió el idioma y estudió en el seminario de Scutari. En su actividad misionera dialogó en particular con sus hermanos ortodoxos y creyentes musulmanes.
