“De Santa Teresa a la desembocadura del Irno, de Torrione a Mercatello, de Torre Angellara a la frontera con Pontecagnano: todas las playas de la ciudad son desde hace años víctimas de la falta de atención y del olvido por parte de la administración municipal. La responsabilidad no puede atribuirse sólo a los groseros de turno. Por un lado, es cierto que una minoría de usuarios de las playas urbanas no muestra ningún respeto por lugares con un valor paisajístico y medioambiental inestimable.
Por otro lado, hay que agregar que el Municipio es completamente desinteresado. Cuando la administración está ausente, afortunadamente son los ciudadanos quienes actúan. En este sentido, cabe dar un aplauso a la asociación Plastic Free y a muchas otras organizaciones voluntarias que en las últimas semanas, con sus intervenciones en la franja costera de la ciudad, han retirado grandes cantidades de residuos de todo tipo, muchos de ellos transportados por el mar durante la temporada de invierno“, argumenta el concejal de minoría.
Pessolano va más allá: “Desde principios del pasado otoño no ha habido ninguna operación de limpieza radical en la costa de Salerno: el enfoque del tema del Palazzo di Città, además de demasiado desinteresado, también es anacrónico.
Dado el cambio climático, es posible utilizar las playas durante un período del año mucho más largo que lo que ocurría en el pasado“.
“El Ayuntamiento, cuando ya estamos a las puertas de la temporada estival, tiene el deber de abordar concretamente la limpieza de nuestras playas – concluye Pessolano – en el caso de que no existan recursos humanos para llevar a cabo intervenciones de este tipo, también será bienvenida una colaboración bien estructurada con asociaciones, siempre que nuestra playa vuelva a recibir constantemente el cuidado y el respeto que merece“.
