La liberación según Fatoumata Diawara en el Festival de Jazz de Turín

La liberación según Fatoumata Diawara en el Festival de Jazz de Turín
Descriptive text here
Gonzalo Rubalcaba en Tjf, foto de Alessandro Bosio

«Vivimos en un mundo donde la mentalidad masculina es opresiva hacia las mujeres, en un mundo loco nos encontramos luchando por los derechos de las mujeres. Vivimos en una especie de Edad Media donde el hombre cree que puede poseer sus cuerpos y quitarles la libertad. ¡En cambio, lo que queremos es libertad! Los conciertos de Fatoumata Diawara nunca son simples decorados musicales, sino que también se convierten en testimonios de dramas sociales, de posturas contra la segregación racial, de indignación ante las miserias de todas las guerras. Entre los terciopelos rojos de la Regio, con entradas agotadas desde hace varios días en el marco del Festival de Jazz de Turín, la actuación de la cantante, actriz y músico africana cayó como era de esperar en el Día de la Liberación, precedida por lecturas partidistas sobre la voz de Sara D’ Amario y el conmovedor testimonio de Adriana Cantore, una niña de trece meses llevada en 1944 con su madre a la prisión “Le Nuove” por orden de los nazis. La madre de Adriana sabía quién había matado a dos oficiales alemanes cerca de Susa, a cuarenta kilómetros de Turín, pero no reveló sus nombres a los SS que ocupaban la infame Primera Ala de la prisión.

EN EL ESCENARIO Fatoumata, guitarra eléctrica al hombro, la acompaña un contrastado cuarteto compuesto por Juan Finger (bajo), Jurandir Santana (guitarra eléctrica), Fernando Tejero (teclados), Willy Ombe (batería), iluminado por cuatro faros y con una pantalla detrás Muestra varios de sus vídeos, ofrece su estilo original que mezcla a la perfección el ritmo afro con músicas del mundo, pop y funk, con muchos extractos de su tercer trabajo. nocaut en Londres, producida por Damon Albarn. Bajos pulsantes y sintetizadores setenteros donde la voz ronca del artista maliense se vuelve penetrante y por momentos persuasiva. Convoca al público, lo engatusa, baila frenéticamente: a los diecinueve años se unió a la compañía francesa de teatro de calle Royale de Luxe con la que viajó por el mundo antes de empezar a cantar en clubes y cafés parisinos. Su música es intrigante fuera de lo común, incluso cuando puede parecer excesiva o, a veces, redundante, donde los polirritmos se persiguen unos a otros. África, pero no sólo, está en el centro de su historia cuando habla de la infibulación en la canción. boloko (del álbum debut fatou), «Más de 200 millones de mujeres en el mundo – afirma – sufren esta práctica devastadora. Sabía que alguien tenía que empezar a hablar de ello para intentar cambiar la mentalidad de miles de personas”.Estándar e inédito para Gonzalo Rubalcaba, las cascadas de notas de Marta Warelis

QUINCE Nominaciones a los premios Grammy, treinta álbumes a sus espaldas, un sinfín de colaboraciones, la carrera de Gonzalo Rubalcaba comenzó a finales de los ochenta gracias a mentores como Dizzy Gillespie y Charlie Haden. El músico cubano se encuentra entre los pianistas más populares de la escena del jazz y así lo demostró también en el directo de Turín formando un trío con dos colaboradores históricos, el bajista Matt Brewer y el baterista cubano Ernesto Simpson. Sentido rítmico y fraseo, en una fusión de estándares (Una noche en Túnez), canciones tradicionales y originales en un juego de referencias y soluciones innovadoras donde también destacan los momentos en los que Simpson construye espléndidos juegos con Gonzalo.
Un mundo sonoro complejo es también el de la joven pianista polaca Marta Warelis, con estudios en Amsterdam, en el escenario del teatro Vittoria para una actuación en solitario compuesta de delicados equilibrios en el campo de la improvisación. Un álbum en su haber (Un grano de tierra de 2022), fue involucrado recientemente por Dave Douglas en su proyecto Salmos seculares. Una actuación absorta entre destellos de silencio y momentos de extremo entusiasmo que culminan en progresiones sonoras y cascadas de notas, deudora en ello de las enseñanzas de maestros como Cecil Taylor.

PREV El último adiós en la catedral de Udine a Gianpietro Benedetti: «Muchos aquí, un gran signo de estima por el hombre»
NEXT Las entradas para el partido contra la Juve B están a la venta pero la Curva Sud abandona el partido fuera de casa.