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Condenado a muerte por su música. Le sucedió ayer, en vísperas de la liberación del nazifascismo, al rapero Toomaj Salehi en Irán. Este último es ciudadano honorario de Florencia. Un personaje querido por el pueblo iraní y muy conocido: casi dos millones de seguidores en Instagram.
Un rapero que expresó una denuncia social con su música. La primera detención se remonta a 2021 cuando fue acusado de propaganda contra el régimen. En libertad bajo fianza, la sentencia llega en 2022. Luego un segundo arresto con un cargo aún más grave: “Actividad de propaganda contra el gobierno, cooperación con gobiernos hostiles y formación de grupos ilegales con la intención de crear inseguridad en el país”. Esta vez en Evin, la prisión de los opositores. La familia denuncia torturas mientras un grupo pro régimen publica un vídeo en el que un hombre con los ojos vendados, que dice ser Toomaj, admite su culpabilidad.
Liberado nuevamente después de 9 meses de prisión, el rapero publica en línea las señales de las torturas que recibió durante su detención. Un gesto que le cuesta una nueva detención porque para el régimen sería falso. Su abogado dispone ahora de veinte días para evitar la ejecución en la horca.
Una condena que llega en un momento en que la atención internacional se centra en los conflictos en Gaza y en Europa (Ucrania-Rusia). El régimen de Teherán da así una clara indicación represiva después de la atención internacional que suscitó las protestas del año pasado provocadas por la muerte de Mahsa Amini.
“Es intimidación para silenciar al pueblo y la lucha de las mujeres iraníes – explican desde el movimiento Mujeres, Vida, Libertad”. “Lamentablemente se dice poco sobre la represión sufrida por las mujeres y los hombres iraníes: la implicación del régimen iraní en el conflicto de Oriente Medio y los posteriores ataques entre Irán e Israel han representado la coartada a través de la cual el régimen ha endurecido las medidas represivas utilizadas contra de su pueblo y de las mujeres iraníes”
“Nosotros, como Asociación Florencia Movimento Donna Vita Libertà, nos reuniremos el viernes 26 de abril a las 14.30 horas frente al Palazzo Vecchio para pedir al alcalde Dario Nardella y a todo el ayuntamiento que intervengan para salvaguardar la vida de un ciudadano de Florencia, contactando el embajador iraní en Roma y pidiendo al gobierno italiano que demuestre un comportamiento decidido y fuerte hacia el régimen iraní”.
