¿Puede el amor ser demasiado? Ésta es la pregunta que se esconde detrás del personaje interpretado por Lunetta Savino en “La madre”, el texto de Florian Zeller que será llevado a escena gracias a la dirección de Marcello Cotugno el viernes por la tarde a las 21 horas en Duemila de Ragusa, el último cita para esta temporada con el Teatro en primer plano, el exitoso evento que sigue cosechando cada vez más reconocimiento.
Anna, una mujer de mediana edad, con una vida dedicada a criar a sus hijos y a su marido (Andrea Renzi), esconde -malamente- aventuras extramatrimoniales llevadas a cabo con la excusa del trabajo. Una familia típica, dos padres y dos hijos, un niño y una niña. Ella no está presente, no está en el escenario y la “Madre” dice en términos muy claros que no le agrada, que nunca la ha tolerado, desde el día en que vino al mundo. En cambio, su hijo (Niccolò Ferrero) es toda su vida, hasta el punto de que su marcha a vivir con su novia (Chiarastella Sorrentino) es peor que el luto.
El escenario en el que se desarrolla la historia de Anna se puede definir como aséptico. Una mesa, dos sillas, un frigorífico, el esqueleto de la cocina de una casa. Un frigorífico que se mueve girando alrededor del centro del escenario, otra producción más de la mente de Anna. A su alrededor destacan estructuras rectangulares iluminadas con neón casi formando un círculo, dando la impresión de ser las puertas de acceso a las demás estancias de la casa donde ocurre casi todo. Un blanco casi cegador es el color predominante, mientras que todos los actores visten ropa en tonos beige la mayor parte del tiempo. Una excepción es el vestido rojo de Anna, símbolo tanto de feminidad como de locura. Taquilla en via Carducci 265 de lunes a viernes de 10 a 12 y de 16 a 18.30. Venta online también en assteatroinprimopiano.com. Información al 333.5705353.
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