Modica, los periodistas Viviana Sammito y Antonio Di Raimondo absueltos del cargo de difamación agravada en la prensa por una presunta violencia sufrida por un niño de 13 años en la playa

Los periodistas modicanos Viviana Sammito y Antonio Di Raimondo fueron absueltos por el Tribunal de Apelación de Catania, primera sección penal, del cargo de difamación agravada en la prensa, porque el hecho no existe. Fueron defendidos por los abogados Giuseppe Lipera y Salvatore Giurdanella. El jurado también decidió revocar las sentencias civiles dictadas en primera instancia. El fiscal general, Angelo Busacca, también había pedido la absolución, pero porque el hecho no constituía delito.
Un asunto judicial que se prolongaba durante 11 años debido a un caso noticioso que se remontaba a 2013 y que se refería a una presunta violencia sufrida por un niño de 13 años en la playa de Marina di Modica la noche de San Lorenzo.

“Una difamación contra desconocidos, dado que en el artículo ni siquiera se identifica a la presunta víctima”, señaló el abogado Lipera, que pidió la absolución de su cliente porque el hecho no existe y, alternativamente, por no haber cometido el delito. .
La periodista Viviana Sammito, que siempre tuvo fe en el poder judicial (aunque en primera instancia una VPO había pedido 7 meses de prisión) y segura de su inocencia, renunció a la prescripción y realizó declaraciones espontáneas ante el Tribunal. “Es una victoria de todos los periodistas – comentó Sammito – que ejercen esta profesión con el máximo respeto por la información de los hechos y la dignidad humana. Fue un caso judicial controvertido que finalmente se resolvió como pensaba. Dedico esta victoria a mi familia, que siempre me ha apoyado y en particular a mi padre, mi maestro. Y, obviamente, le debo mucho al abogado Peppino Lipera, que me apoyó en esta batalla no fácil”.
“Estoy feliz por esta sentencia, dijo Lipera, que modificó la sentencia del Tribunal de Ragusa, no sólo por mi clienta Viviana Sammito que sufre desde hace años, sino ante todo porque es una decisión correcta. La fórmula de absolución, “porque el hecho no existe”, es demasiado clara y cualquier comentario es en vano”.