Todo el nerviosismo del joven danés desembocó en un gesto tan frecuente como condenable en el terreno de juego, en el partido de alta intensidad disputado contra el Fils.
2024 debería haber sido el año de consagración definitiva para Runa Holgertras los buenos resultados obtenidos el año pasado. Y en cambio, tras la final inicial perdida en Brisbane que le había engañado, el joven danés se enfrentó a no pocas dificultades, tanto en términos de resultados como para encontrar la manera de definir a su equipo. Esta semana estuvo involucrado en el ATP 500 de Tokio donde alcanzó las semifinales, donde perdió en dos sets resueltos en un tie-break por Arturo hijoy en esta ocasión ofreció un espectáculo ciertamente poco edificante.
Como se puede ver en este vídeo, de hecho, al final del primer tie-break perdió 10-8, Rune arrojó violentamente la raqueta al suelo varias veces hasta que fue destruida. Esto no es nada nuevo para él, que en repetidas ocasiones se ha convertido en protagonista de algunos gestos desagradables, que a menudo le han llevado a ser también blanco de ataques del público. Sin duda es uno de los aspectos fundamentales a trabajar en su camino de crecimiento, combinar el indudable talento que tiene entre manos con una gestión nerviosa más adecuada.