¿Quién es el tenista que venció a Djokovic?

«Evidentemente se me da bien mantener la cara de póquer, pero por dentro estoy muy nervioso». Con estas palabras Alejandro Tabilo comentó su estado de ánimo tras llegar a la semifinal del Internazionali de Roma, superando a su rival chino Zhizhen Zhang por 6-3 6-4. La de Alexander Zverev será la primera semifinal en un torneo superior a la categoría 250, pero el tenista chileno no parece querer quedarse ahí. El número 32 del mundo, nacido en Toronto de padres chilenos hace 26 años, no estaba ciertamente entre los nombres que se podían predecir entre los cuatro primeros en vísperas del torneo romano.

Hijo de un matrimonio chileno que emigró a Canadá y dueños de uno lavadero, Tabilo comenzó su andadura en el tenis a la edad de 13 años y se mudó a Florida para abrazar el profesionalismo. Pero su vida no siempre fue pacífica. Los problemas de peso marcaron un año para olvidar: pasó de 100 a 65 kg. Historia temprana de su carrera, incluso historia obsoleta. Exorcizado. Porque el propio Alejandro nunca quiso ocultarlo. “Simplemente Había decidido comer menos y había dejado los carbohidratos. – había dicho el entrenador Gómez – pero se había salido de control. Luego gracias a todo el personal solucionamos el problema.” Al cabo de unos meses volvió a ganar algunos kilos de forma saludable: Entrenamientos específicos, plan nutricional a medida. Pero no habrá torneos durante tres meses. Casi un “castigo necesario”.

La victoria sobre Djokovic

Sin embargo, su hazaña no es sólo una cuestión de ausencias, como las de Jannik Sinner y Carlos Alcaraz, porque el marcador le reservaba el encuentro con Novak Djokovic en tercera ronda y el encuentro con Karen Khachanov en octavos de final. En ambos partidos empezó como el perdedor. En ambos salió victorioso sin ceder un solo set. Sin embargo, Tabilo quiere seguir sorprendiendo al público del Foro Itálico. “Estoy viviendo un momento muy positivo, inesperado por los resultados, pero quiero seguir haciéndolo bien y que dure el mayor tiempo posible”. El primer chileno en superar a un número 1 desde 2007 no había superado ni un solo top ten en su carrera hasta el momento.

Carrera en ascenso

La victoria sobre el serbio es sin duda la victoria que le contará a sus nietos. “Estoy tratando de despertar de este sueño, es increíble”, dijo tras un partido con un pronóstico aparentemente cerrado. En la rueda de prensa luego dijo: «Inmediatamente después del partido hablé con mis padres, mi novia, mis amigos. Estamos incrédulos, incluso lloramos todos juntos. Cualquiera que conozca mi carrera sabe que todo esto es una locura”. Aún no terminada la aventura en los Internacionales, vive la mejor temporada de su carrera, tras el triunfo en auckland (el primer torneo ATP ganado), el reciente en el Challenger francés de Aix en Provence y el casi éxito en casa, derrotado en la final sólo por el argentino Sebastián Báez. Desde enero, 19 victorias y sólo nueve derrotas. Italia también es un lugar especial para él. “Tengo tantos buenos recuerdos aquí”, dijo. Tabilo. Siendo junior, cuando estaba entre los mejores 30 talentos emergentes menores de 18 años, el chileno jugaba en Prato y Milán. En los circuitos profesionales saltó luego a Bolonia, San Benedetto del Tronto, Francavilla al Mare, Cordenons, Génova, Como, L’Aquila y Manerbio, antes de sus hazañas en Roma.

Pros y contras

El ajedrez, una de sus grandes pasiones además del tenis, compartida con los rusos, podría haberle enseñado la frialdad en la pista, típica de los tenistas, que no revela emociones en los momentos críticos de un partido. Khachanov y Rublev. “Hace tiempo que no juego”, admitió. «Creo que me ayudaron en el tenis, porque en ambas disciplinas hay que estar un paso por delante del rival e interpretar bien el juego y cada movimiento». Sin embargo, confesó que no es muy ordenado y metódico, muchas veces olvida cosas y casi siempre llega al aeropuerto en el último momento. Antes de tomar un vuelo hasta olvidó su billetera con todos sus documentos São Paulo, Brasil, cuando tuvo que marcharse para disputar un torneo. Sin embargo, seguramente ya habrá dado la alarma para la semifinal del viernes. La cita es con la historia, ahora no sólo la suya.

NEXT El circuito apunta al futuro. Sostenibilidad y seguridad para seguir soñando con la F1