2027 representa un año importante para MotoGP, en el que entrarán en vigor las nuevas regulaciones. Esta será una revolución importante para el campeonato, dado que desaparecerán los Holeshots (que tanta discusión han causado en el pasado) y se reducirán la aerodinámica y la cilindrada. Pero la categoría reina del campeonato del mundo no es la única que sufrirá cambios en el futuro, ya que Superbike también está en la mira.
El Campeonato del Mundo de derivados de producción, todavía bajo el control de Dorna (y luego de Liberty Media), ha implementado desde hace tiempo varios cambios regulatorios y el último cambio llegó en 2024, con la introducción del peso mínimo entre moto y piloto. Pero eso no es todo, pues un nuevo cambio de reglamento fue anunciado en la rueda de prensa celebrada en Le Mans con motivo del Gran Premio de Francia.
El motivo por el que el reglamento de World Superbike sufrirá más cambios es para seguir manteniendo las distancias entre los dos campeonatos gestionados por Dorna, MotoGP y SBK. Así lo informó Jorge Viegas, presidente de la FIM, durante la conferencia celebrada hoy en el icónico trazado francés. Carlos Ezpeleta, por su parte, quiso subrayar que la distancia entre ambas realidades no afectará a la naturaleza de los derivados de la producción: “La Superbike vivirá en el mismo ecosistema en el que se encuentra actualmente. Ya estamos haciendo varias cosas con el campeonato, que está dirigido por la FIM”.
Carmelo Ezpeleta, director general Dorna Sports, Jorge Viegas
Crédito de la foto: Gold and Goose / Motorsport Images
Jorge Viegas explicó con más detalle en qué consistirá el cambio previsto para Superbike, quien no oculta que quiere seguir manteniendo la categoría reina de prototipos en lo más alto de la pirámide y afirma que quiere definirlo todo para 2026: “Obviamente queremos tener MotoGP en la cima. Superbike fue diseñada como una categoría de motocicletas estándar, con algunos cambios. Ya empezamos a implementarlas hace dos años con el cambio de normativa.”
En este sentido, el BSB será de gran ayuda. El campeonato nacional británico, uno de los más destacados del panorama de Superbike, servirá como experimento para los cambios reglamentarios que se propondrán en el campeonato del mundo: “Claramente, intentamos mantener una cierta distancia entre MotoGP y Superbike. Estamos hablando con los diferentes fabricantes, tenemos algunos más en Superbike que en MotoGP, pero también es un gran trabajo hecho en cuanto a soluciones. También estamos trabajando en la próxima generación de Supersport 300. Usemos un poco el BSB como prueba para ver cómo se aplican estas reglas. Pero espero que en el 2026 se defina la nueva generación”, aclaró Viegas.
